La última semana y las últimas migajas

Germán Rodriguez Bustamante

Por: Germán Rodríguez Bustamante…

Esta semana culmina con un evento electoral a celebrase el 06 de diciembre, el cual puede ser la ruptura del sistema político imperante desde el año 1998, las profundas contradicciones se han hecho más visibles para todos los ciudadanos, medidas de control que favorecen a una elite conectada con las instancias de poder y que terminan afectando a la mayoría de los venezolanos, es una expresión de la injusticias de un modelo económico que no resuelve los problemas de la gente.

En algunos grupos y sectores de la cúpula socialista se reconoce la existencia de una situación inusual y grave, que requiere una respuesta distinta a la que han usado, pues si persisten pueden incluso agravar el problema; la gran mayoría de encuestas aplicadas de cara al acto electoral parlamentario muestran una fuerte intención de voto a favor de los factores democráticos de oposición, representados en la mesa de la unidad democrática (MUD), razones por las cuales el gobierno en esta última semana usará todos los medios y recursos a disposición, para intentar detener el deslave experimentado en sus filas. Debo clarificar que en este esquema polarizado, los bloques separados por visiones económicas, sociales y políticas, conviven pacíficamente y alimentan la polarización, en consecuencia las voces moderadas desaparecen, violentando el principio constitucional de la representación proporcional de las minorías, es lastimoso sin embargo esa es la realidad de nuestro modelo electoral.

Ya comenzó la instrumentación de mercados a cielo abierto en camiones y cualquier medio posible, para hacer accesible algunos bienes de la canasta alimentaria con la finalidad de mantener la fidelidad al comandante y al modelo, de esta manera demostrar la sensibilidad suprema de un gobierno afectado por una guerra económica dirigida por la oligarquía burguesa. Acciones que no responden a políticas sostenibles en el tiempo, por el contrario son gestiones puntuales para preservar la esperanza del pueblo, en un modelo anacrónico, inviable y profundamente corrupto, tanto es así, que las providencias administrativas de controles de precio, costos y ganancias no se podrán cumplir en las megajornadas, a pesar de que se dispone de dólares preferenciales para realizar las importaciones. En este contexto surge la duda acerca de la eficiencia en el manejo de las divisas, ya que sí la tasa de cambio se ha mantenido anclada desde comienzos de año, porque razón financiera los precios de los productos importados aumentan, teniendo presente que los precios internacionales están estabilizados, indudablemente hay una minoría que se lucra por el manejo de las licencias, dejando a los ciudadanos desprotegidos y receptores de migajas.

Las reservas internacionales al 26/11/2015 alcanzan a 14.864 millones de dólares, cifra que muestra la caída brutal de nuestros ahorros en dólares, lo que cuestiona la viabilidad de la política masiva de importaciones para resolver los niveles de escasez y desabastecimiento presentes, lamentablemente este gobierno en un acto de desesperación política; hipoteco a la nación con los chinos; declaro un default con los proveedores nacionales e importadores privados; destruyo operativa y financieramente a nuestra principal industria; arruino al aparato privado nacional y a los importadores de materias primas y bienes intermedios y como colofón cuida su reputación financiera pagando puntualmente a los tenedores de bonos internacionales. En este marco procura que los venezolanos no castiguemos políticamente en un proceso electoral, semejante irresponsabilidad que con toda seguridad la pagaremos en el futuro todos, con medidas restrictivas y sacrificios.

Estimados amigos llegó el momento de: aceptar las migajas a pesar que esto lo tengamos que perfeccionar en colas interminables y medidas de racionamiento; recibir los carros entregados con limitaciones de tiempo para su propiedad; admitir las promesas de inclusión en misiones y gozar de sus beneficios; consentir la promesa de la vivienda millón; aguantar la presión política; soportar el eslogan de como sea a la asamblea; pero votar conscientemente castigando o premiando la gestión realizada.

Para finalizar la reconstrucción de Venezuela exige un sacrificio en el que debe participar la mayor cantidad de compatriotas, sin discriminaciones de ningún tipo; de igual manera debemos liderar un movimiento de recuperación del país, partiendo de la realidad social, con propuestas claras para solventar los problemas económicos, sociales y finalmente los políticos, incorporando a las personas más capacitadas en cada área particular, sin importar su afiliación partidista y elaborar una visión de país compartida, con perspectiva de largo plazo, para romper con el modelo anacrónico, centralizado y populista; elaborando el plan para transitar del estado actual de cosas hacia el futuro soñado por todos, EL VOTO ES EL MEDIO PARA HACERLO; TODOS A VOTAR

ULA – FACES
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