Por: Andrés E. Mora M…
“Teniendo entre ceja y ceja la reelección, Maduro se ha dado a la tarea de anunciar, con el mayor desparpajo y como fundamento de su estrategia electoral, cuanto bono se le ocurra o le venga a la cabeza. El más reciente ha sido, hasta ahora, el Bono del Día de la Juventud que se comenzaría a depositar, supuestamente, el pasado 12 de febrero. Pero previo a ese, ya había anunciado una retahíla de ellos: el Bono de Carnaval, el Parto Humanizado, el José Gregorio Hernández, y el de Reyes, que fue con el que inauguró el 2018. Todos, por cierto, con el mismo monto, 700 mil bolívares, y, por supuesto, canalizados a través del Carnet de la Patria, el instrumento fascista de control social diseñado por la dictadura”, le comenta Ingenuo Sinduda a Incredulina, su esposa, mientras esperan pacientemente el turno para hacerse de los míseros 10 mil bolívares que son permitidos retirar diariamente de los cajeros automáticos.
“Los bonos en este gobierno son tan frecuentes como las masacres”, comenta un humilde anciano volteándose y dirigiendo la mirada a nuestros amigos ubicados inmediatamente detrás de él en la interminable «cola», quienes aprueban lo dicho moviendo la cabeza. “Capaz que, de escucharme, me lleven preso a pesar de mis 80 años. Así como hicieron con el Dr. Enrique Aristeguieta Gramcko”, agrega refiriéndose a la retención, por demás ilegal y bochornosa, del único miembro vivo de la Junta Patriótica que asumió el gobierno tras la caída del dictador Marcos Pérez Jiménez. “¡Con esta gente gobernando no hay derecho humano que valga!”, murmura el señor retomando su posición original.
“Pero no sólo se trata de comprar adhesiones con las migajas de esos bonos fomentadores de improductividad, empobrecedores del autoestima y generadores de inflación, sino de procurarle «pan y circo» a la depauperada población para maquillar la realidad. Aunque, a diferencia de los césares en la antigua roma, el actual emperador del «proceso» está en condiciones de ofrecer únicamente «circo», porque «pan» ¡No Hay!”, agrega el profesor jubilado al retomar la conversación que sostenía con su señora antes de la intervención del lúcido octogenario ávido de que su opinión fuese escuchada.
“Partiendo del «Panem et circenses» es que el régimen no escatimó recursos para montar el Festival Recreativo, Deportivo y Cultural Carnavales 2018 que de acuerdo a lo informado el pasado 10 de febrero por Pedro Infante, el mandamás del Ministerio del Poder Popular para la Juventud y Deporte, se celebraría en más de 3.800 lugares de Venezuela, con música y actividades deportivas para el disfrute de toda la ciudadanía. «Hay derecho a la recreación, a la paz, la seguridad, al turismo y a la felicidad», habría expresado en esa oportunidad el jubiloso ministro” señala Incredulina. “Pero al hablar de derechos, el detallito que obvió el alto funcionario, tocayo de uno de los grandes representantes de la música ranchera e ícono de la Época de Oro del Cine Mexicano, de ahí, quizás, su entusiasmo por el mundo del show y del espectáculo, fue que los atletas de alta competencia tienen el derecho de participar en justas internacionales, y que su despacho tiene el deber de, entre otras muchas responsabilidades, garantizar la logística más adecuada para que ellos asistan. Obligación que ha venido incumpliendo de manera recurrente desde el año pasado al punto que, en lo que va de este joven 2018, se ha hecho oídos sordos a peticiones presentadas por la federaciones de tenis y baloncesto”, acota la dama.
“No escatimaron recursos para montar el «circo», pero enviaron por carretera a la delegación que nos representó en los Juegos Bolivarianos 2017 celebrados en Santa Marta, Colombia. ¡Eso fue una afrenta a nuestros atletas! Esperemos que a las citas de este año, Sudamericanos de Cochabamba, Bolivia, y Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, Colombia, al ministerio no se le ocurra enviar a las delegaciones pidiendo cola”, le comenta con sarcasmo el catedrático a su mujer cuando caminando de regreso a casa, después de retirar el efectivo que, sumado el de ambos, sólo alcanza para comprar un huevo, se encuentran en la vía con un mitin improvisado, al que deciden acercarse por curiosidad.
“Si la delegación de la MUD en República Dominicana no firmó el acuerdo que presentó el régimen por intermedio de Jorgito y Rodríguez Zapatero, a quien la máscara de mediador se le fue desvaneciendo hasta revelar el rostro de uno de los apéndices ibéricos del PSUV. Si la delegación oficialista se negó a estampar su firma en la contraoferta opositora que detallaba, en 18 puntos, un proceso electoral con garantías de transparencia e imparcialidad, al incluir: designación de nuevos rectores del CNE, Observación Internacional en todas las etapas e instancias del proceso electoral, la reversión de las inhabilitaciones políticas a todos los dirigentes de la oposición, la legalización inmediata de los partidos MUD, VP y Primero Justica, entre otros, que incluían aspectos técnicos importantes. ¿Qué le impide a la MUD oficializar su no participación en las inconstitucionales elecciones presidenciales del 22 de Abril convocadas por el CNE a petición de la írrita ANC?”, deja la pregunta en el aire el que llaman Pablo Pueblo.
“Entender que se participa en presidenciales reales, no en octavitas de carnaval legitimadoras de dictaduras”, contesta Ingenuo provocando un ensordecedor aplauso de la concurrida asistencia.
(٭) Prof. Titular jubilado ULA – Cronista deportivo
aemora@gmail.com, @amoramarquez