La ciudad de Mérida y poblaciones que conforman la entidad andina amanecieron este lunes con todas sus actividades paralizadas, las calles desoladas, comercios cerrados, incluyendo farmacias a la espera de la reanudación de las operaciones bancarias en las próximas horas.
En la capital merideña no hubo ni el improvisado servicio de transporte público que prestan las llamadas “perreras” lo que complico a muchas personas acudir a aquellos sitios de trabajo que por razones especiales no se pueden paralizar como servicio de vigilancia, centros de salud.
La actividad turística también se ha visto afectada para los temporadistas que visitaron la ciudad ya que sus billetes no fueron recibidos en la compra de pasajes y gastos internos de su estadía entre las que se incluyen la alimentación.
Foto Leo León
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