Por: Salomé Higuera-Morales…
El emprendimiento es definido como el inicio de una actividad que exige esfuerzo o trabajo, o tiene cierta importancia o envergadura. El emprendimiento requiere estar dispuesto a tomar riesgos relacionados con el tiempo, el dinero, y el trabajo arduo.
El emprendimiento, dicho así, podría ser el paralizador absoluto de quien porta miedos para dar un paso adelante en su idea de negocios o podría ser el impulsador para quienes les apasionan los retos, y es que hay características específicas que definen a este tipo de personas y hay personas que sin tener estos rasgos podrían llegar a convertirse en grandes empresarios.
¿Qué hace falta para salirle a ese toro de frente? ¿Realmente existe una alternativa para ello, más allá de tener una idea y querer hacerla realidad?
¡Oye, a ti te iría bien montando un restaurant! ¿Cuántas personas no hacen click con esta expresión? En algún momento, aquellas que gozan de grandes habilidades y sazón para la cocina, han escuchado esa invitación, algunas de ellas se lo han creído, otras, se lo han creído y han dado el paso, otras, han dado el paso y han muerto en el intento, y otras, ni siquiera lo han intentado.
“Hay dos clases de personas en este mundo”, escucharíamos en el film Stuck in Love; quizá el emprendedor y el no emprendedor por naturaleza, pero igualmente se puede formar, hay quienes trabajan para ello, y lo que es mejor, hay gente que acompaña para que otros alcancen las competencias necesarias.
Emprendedores: hágase el coaching… ¡y el coaching se hizo!
“El coaching procede del término inglés “to coach” que significa “entrenar”. En el entorno empresarial y personal se conoce por coaching al proceso interactivo y transparente mediante el cual el coach o entrenador y la persona o grupo implicados en dicho proceso buscan el camino más eficaz para alcanzar los objetivos fijados usando sus propios recursos y habilidades. El coaching es un sistema de preguntas por el cual el coach (profesional) ayuda al coachee (cliente) a sacar lo mejor de sí mismo”, se lee en el blog del Dr. Mónico Carvajal, Coach de Coaches.
Mónico es especialista en consultoría y sistemas humanos, es Coach Formador. El mismo Mónico terminó aclarándome en una agradable tertulia, otras cositas que me encanta poder compartirlas contigo.
¿Qué tiene que ver el coaching con el emprendimiento? indagué. “El emprendedor requiere ser acompañado, lo que llamamos el arte del inicio, de emprender, hay quienes desearían iniciar un negocio y no saben cómo”, aclaró.
La buena noticia al dudar de, si el emprendedor nace o se hace es que “todos tenemos posibilidades para todo” pero existen “características básicas de un emprendedor, primero lo que llamamos el locus de control interno; si el emprendedor todo lo atribuye hacia afuera, que no le dan, que nadie le presta, no va a poder emprender porque está culpabilizando, victimizando; número dos asertividad, hay gente que no sabe pedir para generar relaciones comerciales , cuando usted va a pedir un crédito tiene que saber pedir; y la tercera es tener un espacio, más allá de la responsabilidad y el pedir es el hecho de saber coordinarse, como una inteligencia social distinta, a veces los grandes empresarios no son los que tienen más dinero ni más recursos, son gente que sabe coordinar sus emociones, una persona que está relacionándose con carisma, con alegría, es un atractivo, la gente se le aparece solita y hay que utilizar eso a favor, un emprendedor tiene que tener esa característica”, agregó Mónico.
Esas características propias del emprendedor podrían estar sujetas a la cultura, al país y su entorno económico y social, a particularidades geográficas, a sus creencias, a su crianza, a la educación que ha recibido, a lo que ha visto en casa.
El cambio no es de la noche a la mañana ni cae del cielo, lo que sí es cierto es que el mundo ha evolucionado y existe gente especializada para ofrecer formación y acompañamiento en una actividad tan importante para la economía de un país, para reactivar campos de trabajo, para generar empleos, para producir bienes y servicios, para generar bienestar individual, expansivo con repercusión global.
Es que hasta existe algo llamado siconeuroinmuendocrinología, que es la alineación entre la mente, el sistema inmunológico y el sistema endocrino para generar estados de consciencia distintos a través de los neurotransmisores, configuraciones musculares y configuraciones nerviosas. Suena un poco complicado pero es sencillo de entender cuando en el lenguaje coloquial hablamos del papel que juega nuestro cuerpo en el tema del “poder” hacer una “actividad que exige esfuerzo o trabajo, o tiene cierta importancia o envergadura”.
Es fascinante saber que detrás de la línea del tiempo entre una gran idea y un emprendimiento exitoso, yace gente especializada para ello.
@salomehiguera
