“Hay que rechazar de manera pacífica y masiva las captahuellas para la compra de alimentos, porque esa medida conduce al deterioro de la calidad de vida de los venezolanos”.
Así lo expresó el diputado a la Asamblea Nacional (AN), Carlos Ramos, quien destacó que tanto los ciudadanos como los empresarios, deben rechazar la implementación del sistema biométrico, toda vez que el mismo forma parte de un gran negocio del gobierno para instalar las captahuellas.
“Algunos boliburgueses se van a hacer muy ricos, pero en detrimento de los consumidores, porque el sistema biométrico controlará la escasez y el hambre, es la evidente demostración que el modelo económico del gobierno fracasó”, dijo Ramos.
El diputado llamó a los ciudadanos a rechazar públicamente el uso de captahuellas en supermercados y abastos y aupó cualquier protesta pacífica, enmarcada dentro de la Constitución nacional, pues dijo que el rechazo público tiene que hacer rectificar al gobierno sobre la medida.
Por último, Carlos Ramos resaltó que cada vez que un régimen va a caer o algún gobierno está en crisis, lo primero que hace es controlar las ventas y muestra de ello es el sistema biométrico. (Prensa Carlos Ramos)
