El impacto ambiental que tendrá el desarrollo del denominado arco minero, impulsado por el gobierno nacional en el sur de Venezuela, será denunciado por los integrantes del Parlasur ante los países miembros del Mercosur, pues con este desarrollo se estará afectando no solo a nuestro país, sino también a toda la región amazónica del continente.
Así lo informó el diputado al Parlasur Luis Loaiza, en rueda de prensa ofrecida en conjunto con el precandidato a la gobernación de Mérida, economista Carlos Ramos, y el ingeniero forestal y asesor ambiental de su campaña, Carlos Unshelm, en el cual se trataron temas ambientales de vital importancia para Mérida y el país.
Loaiza dijo que el denominado arco minero, mediante el cual el actual régimen pretende extraer oro para obtener divisas alternas a la explotación petrolera, no cumple lo establecido en la Constitución en materia ambiental. Entre sus graves consecuencias esta la afectación de una extensa zona de selva al sur del país donde existen frágiles ecosistemas, que a su vez alterarán la vida y el hábitat de nuestros indígenas, los habitantes originarios de esa región de Venezuela por siglos. Pero lo más grave es que esa explotación minera afecta las microcuencas que surten de agua al más importante sistema hidroeléctrico de Venezuela, lo que podría dejar a oscuras al país, secuela que no ha sido tomada en cuenta por el régimen de Nicolás Maduro al llevar adelante este supuesto proyecto de desarrollo minero.
Carlos Ramos, por su parte, denunció que ni al gobierno regional ni nacional les preocupa la situación ambiental y por eso los venezolanos no podemos mantenernos indiferentes ante estos atropellos ambientales. Agregó que es un defensor de la protección de las cuencas y del agua potable de calidad para los ciudadanos, no solo para Mérida sino para todo el país, y afectar las cuencas del sur de Venezuela es comprometer el agua potable de estas y las futuras generaciones. En sus últimos recorridos por Mérida, dijo, le ha preocupado que, en muchos de sus municipios, existen pueblos y aldeas donde pasan más de 24 horas sin servicio de agua.
El ambientalista Carlos Unshelm, ante estos problemas, dijo que el actual régimen ha sometido al país a una crisis socio ambiental de enormes proporciones. El arco minero viola todo lo establecido en la constitución y en las leyes ambientales del país. En cuanto a Mérida, Unshelm denunció que estamos ante un estado colapsado en materia de disposición final de residuos sólidos, con 14 vertederos de basura que están cerca de fuentes de agua. El vertedero de Las Calaveras atiende cinco municipios, entre estos el Libertador de Mérida, al cual llegan 350 toneladas de basura diaria sin un programa de separación y clasificación de residuos.
Prensa Carlos Ramos
