El Big Ben Deportivo: Nuevo pitcher en la “lomita del horror”

Por: Andrés E. Mora M… 

“¡La sub-23 de béisbol lo hizo!”, exclama un emocionado Ingenuo Sinduda al apenas contestar – sin ni siquiera un ¡Buenos días! de por medio – la llamada hecha a su celular por su entrañable amigo y compadre Benefactorino Montiel, el ingeniero maracucho residenciado en Río de Janeiro, quien decidió contactar al profesor jubilado de la ULA antes de que en la capital merideña saliese el sol hoy sábado 3N.

“¡Esos muchachos son unos vergatarios!”, se le escucha gritar eufórico al otro lado del teléfono inteligente al nacido en «El Saladillo». “¡A la verga compadre! ¿Vos sabéis lo que me tiene cabezón? Que Pedro Infante salga con una de las suyas ¡Mirá que hace unos días lo hizo de nuevo!”, dice – con una voz que ahora denota preocupación – el marabino, refiriéndose al ministro del deporte que bajo su gestión, la más gris que el país haya conocido jamás, Venezuela ha dado hasta seis forfeit en torneos internacionales de distintas disciplinas. El más reciente ocurrido hace algo más de dos semanas, cuando no asistió a la 24º edición del Campeonato Suramericano Femenino U20 de voleibol que se celebró en Lima del 16 hasta el 21 de octubre, convirtiéndose en el tercero que le es decretado a esta disciplina. Los restantes fueron en boxeo, esgrima y softbol. 

“El equipo criollo al hacerse del bronce, y sumar 520 puntos, mejoró en dos posiciones su ubicación en el ranking mundial y pasó a ocupar el noveno lugar. Este resultado le permite asegurar su participación en el «Premier 12» a celebrarse en noviembre del próximo año en Japón.  Torneo en el que tomaran parte las naciones que ocupen los primeros doce escaños de la clasificación mundial y de donde saldrán dos de los cinco países, los otros tres se definirán en clasificatorios posteriores, que junto al anfitrión dirán presente en los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Evento que significará el regreso del béisbol a unas Olimpiadas después de 12 años de ausencia. De hecho, Corea del Sur, la selección que nuestra vinotinto venció 5-4 el pasado domingo para ocupar el tercer lugar en el mundial U23 de Colombia, fue la última divisa en llevarse la medalla de oro en unas olimpiadas al vencer a Cuba 3-2 en la final de Beijing 2008”, comenta el catedrático.

“No cabe duda que en el éxito de nuestro seleccionado tuvo mucho que ver el trabajo mancomunado entre la Federación Venezolana de Béisbol y la Liga Venezolana de Béisbol Profesional”, piensa el catedrático a manera de reflexión. “Esa es una pequeña muestra de la importante contribución que está llamado a dar el sector privado al país en todos sus órdenes. Por supuesto, ¡si el régimen lo permitiera y dejara a un lado su enfermiza obsesión de querer exterminarlo!”, recalca el docente en este momento de ensimismamiento en el que recuerda – palabras más, palabras menos – lo expresado por el economista chino al contestarle al ministro venezolano Castro Soteldo – quien le preguntó, refiriéndose al sector privado ¿Cómo lo controlamos? – que en su país el 90% de las empresas son privadas y que el Gobierno no controla sino, por el contrario, las incentiva para lograr los objetivos de productividad y, en algunas situaciones, les brinda subsidios para que alcancen mejores resultados. Entendiendo que si las empresas privadas elevan la productividad y mejoran la eficiencia todos los ciudadanos ganarán más. “¡Swing y faaaaalla!”, a Ingenuo le viene a la memoria la popular frase con que anunciaba los ponches el recordado «Musiu» LaCavalerie. El icónico narrador de los Tiburones de La Guaira, equipo del que fuera aficionado otro ilustre venezolano, fallecido también, aunque hace menos de 72 horas: Teodoro Petkoff. Una de las mentes más lúcidas de la política venezolana y quien en innumerables oportunidades a través de Tal Cual, el exitoso diario que fundó, y al ritmo del «¡Papita, Maní, Tostón!» ponchó al oprobioso régimen que padecemos.

“¡Aló, compadre! ¿Me escucháis?”, pregunta ´Benefactorino una vez más. “¡No te hagáis el Willy May!”, insiste el marabino impacientándose.

“¡Te escucho, compadre! Disculpa, pero estaba distraído pensando en algunos ponches célebres”, contesta Ingenuo, volviendo a la conversación.

“Explicame una verga, compadre. Si Maduro cuenta con un pitcher que desde que se montó en el montículo de la tenebrosa policía política maniató a los derechos humanos en Venezuela, al extremo que en sus 4 años de actuación le estuvo lanzando «no hit no run» ¿Por qué lo cambia?”, pregunta un curioso Montiel refiriéndose al intempestivo cambio  en la dirección del Sebin.

“Quizás sea por una cuestión de confianza. Los managers cambian de lanzadores de acuerdo a las circunstancias del juego”, señala Ingenuo. “De cualquier manera, Nicolás nunca hizo reparo alguno con respecto al amplio repertorio de «lanzamientos inconstitucionales» usado desde la «lomita del horror» por el G/M Gustavo González López y que estuvo conformado, entre otros muchos, por: detención de políticos sin órdenes judiciales, desacato a las boletas de excarcelación emitidas por los jueces, tortura psicológica en «La Tumba» y tortura física en «El Helicoide»”, añade el caraqueño.  

“¿Y qué sabéis vos del nuevo pitcher?”, pregunta Montiel

“El general Manuel Ricardo Cristopher Figuera, según reporte de Primero Justicia, representa más tortura, más violaciones a los derechos humanos y más persecución contra quienes queremos una Venezuela distinta», indica Sinduda.  

“¡Vergación! Ese cambio de pitcher en la «lomita del horror» fue solo para consolidar el terror”, concluye Benefactorino.        

(٭) Prof. Titular jubilado ULA – Cronista deportivo            

      aemora@gmail.com, @amoramarquez