Expansión de la frontera agrícola ¿Necesidad o peligro?

Por: Abg. Diego Rimer

La humanidad atraviesa un proceso de crecimiento sobre el cual se proyecta que para el año 2050 la población mundial llegará a los diez mil millones de habitantes ¿Cómo alimentarla? siendo éste un reto de ingeniería social, económica y política de dimensiones astronómicas, puesto que el aumento del poder adquisitivo de las personas y la reducción de la mortalidad infantil significa que la población seguirá creciendo de manera vertiginosa en los próximos 40 años, demandando más alimentos, insumos y productos procesados, ante esto, una de las  respuestas para solventar el reto parece ser la expansión agrícola y diseño de grandes sistemas de producción agrícola basados en labranza mecanizada que puedan inundar el mercado de cereales y caña de azúcar para asegurar la alimentación de los seres humanos, incremento del número de cabezas de ganado bovino para aportar proteínas suficientes a la población mundial e incremento de caña de azúcar y cereales también para la producción de fuentes renovables y “menos contaminantes de combustible”.

Sin embargo, esta práctica presenta una serie de factores son amenazas para la existencia humana, entre los cuales encontramos:

  1. La expansión de la frontera agrícola sin políticas forestales adecuadas, significa un descenso en la “protección forestal natural” con la que goza el planeta y que esta garantiza a su vez: producción de oxígeno, humedad y diversidad biológica, por ello el desarrollo de la expansión agrícola sin políticas de control, prevención y reforestación, sumada al desarrollo industrial de las naciones emergentes y potencias industriales que aún no diseñan métodos sustentables contribuye al calentamiento global, acelerando la desertificación planetaria que disminuye además la cantidad de agua apta para consumo humano.
  2. El desarrollo del etanol como fuente de combustible alternativa es un obstáculo ambiental, opuesto a la salud pública, puesto que las grandes compañías procesadoras del combustible aúpan la expansión del monocultivo (caña de azúcar o maíz) sin tomar en cuenta los problemas de dimensión ética en muchos pueblos donde es necesario abastecer de alimentos a la especie humana, siendo éste el principal factor de expansión agrícola insostenible que atenta contra fauna, flora y agua vitales para el mantenimiento del futuro de los seres humanos.

Es necesario tomar medidas contundentes, a través de legislaciones y políticas públicas dirigidas a incentivar prácticas agrícolas sustentables, que garantizan mayores y mejores rendimientos en menores extensiones de territorios sumados a un uso eficiente del recurso agua, igualmente, el desarrollo de combustibles más limpios debe venir de elementos que realmente representen un menor impacto ecológico en detrimento del planeta.

La expansión de la frontera agrícola, pareciera ser un fenómeno indetenible, propio del crecimiento vegetativo poblaciones, pero la reflexión general es ¿Cómo alimentar a los pueblos y salvaguardar nuestro futuro? Una respuesta oportuna es necesaria.