La agricultura en nuestros suelos, de lo insostenible a lo sustentable

Hoy en día sabemos que el uso irracional de los insumos, productos químicos puestos al servicio agrícola, provoca una profunda degradación con sensible pérdida de la fertilidad de los suelos, y hay una drástica disminución de la biodiversidad que trae como consecuencia una fuerte contaminación de los Recursos Naturales y de los propios productos cosechados, la contaminación que producimos es tan grande que la salud del ser vivo está destinada en el campo a ser afectada directamente, la falta de capacitación teórica para poder aplicar los productos químicos.

En nuestros Páramos y la población de Bailadores se presenta mucha alteración genética; niños con Síndrome de Down, retardo, que día a día se eleva, y los productores llevan dentro de su organismo una cantidad de toxico que han absorbido a través de la piel, olfato y boca, en algún momento esto estalla en su cuerpo produciéndoles un desorden neurológico, por lo cual pierde el sentido, y hasta la muerte, lo que trae como consecuencia aguas abajo la contaminación afectando así también a los animales se encuentran, tenemos entonces un problema magnanime en los alimentos que producimos, la alteración genética de la semilla llevan consigo, y no podemos decir que gozamos de una alimentación sana, estamos ofreciendo un producto con un gran contenido toxico lo que hace que los deberes y derechos que nos presenta nuestra Constitución nacional y Ley Orgánica del Ambiente no se cumpla, como es el de no originar alteraciones en los suelos, agua y ambiente, y no la conservación de los Recursos Naturales como debe ser. Desobedeciendo así las leyes, sin sanción alguna, contribuimos a que se forme un planeta netamente contaminado.

Seguidamente nos inclinaremos al uso de prácticas agrícolas orgánicas, el ambiente nos de microorganismos como la rizobacterias (bacterias que se encuentran en la rizosfera), capaces de transformar el nitrógeno atmosférico en nutriente asimilable por las plantas a través de sus raíces, solo tendremos que aportar materia orgánica y nunca dejar desnudos nuestros suelos, así contribuimos en el proceso de descomposición por parte de estas excelentes bacterias. Haciendo posible que el uso de fertilizantes químicos disminuya o lo que es mejor se elimine. Siendo coherente la dialéctica para emancipar mediante los consejos comunales en foros, charlas, socializaciones, lo que traerá un beneficio de crecimiento epistemológico en la comunidad, en búsqueda de una integración constructivista axiológica, creativa innovadora, aunada aún desarrolla humano sostenible en el tiempo.

Ing. Agrónomo: Sara E. Linares R.

Estudiante III Semestre de la Maestría en Desarrollo Agrario.