Por: Eleazar Ontiveros Paolini…
No entendemos por qué agrupaciones pertenecientes a una misma institución, léase gremios y sindicatos, con dificultades similares y con necesidades y apremios que requieren para todos el mismo tratamiento, se aíslan al anteponer nimios intereses políticos que dificultan o imposibilitan acuerdos colectivos, los cuales, en todo caso, estarían orientados a resolver problemas y reclamar derechos análogos.
Pues bien, dando un paso histórico y aleccionador, los sindicatos y gremios universitarios se han puesto de acuerdo en cuanto a un Proyecto de Contratación Colectiva Única (2015-2016) que como tal será presentado a las instancias gubernamentales, habiendo privado en su elaboración propositiva la básica consideración de que los salarios y otros beneficios son derechos que deben ser impactados positivamente por efecto del principio constitucional de la progresividad. El Ministerio del Trabajo tiene 30 días continuos, es lo establecido, para convocar a una Reunión Normativa Laboral en que se considerará el Convenio.
No faltan los obcecados, incapaces de aceptar normas y procedimientos diferentes a los que impone el régimen, que rechacen las pretensiones de la gran mayoría de los universitarios, alegando, por sobre todo, que son solicitudes con las cuales se pretende enajenar, por efecto de lo crematístico, la pureza del proceso. Pero la justeza de lo solicitado queda demostrada cuando, con la contundencia de los números, apercibimos una cruda realidad, necesaria de violentar, so pena se seguir disminuidos en el desenvolvimiento de nuestras vidas, ligadas en su calidad a la satisfacción de bienes y servicios indispensables. Es bueno saber que el Gobierno exigió, para poder considerar el Convenio, que participaran en su elaboración todos los gremios y sindicatos. Así se hizo.
Algunos ejemplos son demostrativos. La canasta básica, que define a la totalidad de bienes y servicios, está en el orden de los 36.000 Bs. Si un profesor Titular a Dedicación Exclusiva gana, y es el sueldo más elevado en la Universidad, 15.297, quiere decir que le faltarían para suplirla 20.703 Bs. y para cubrir la llamada Canasta Familiar Normativa, estimada en 22.000 Bs., le faltarían 6.703 Bs. Entonces, no puede haber la menor duda ni se puede titubear. Amalgamados profesores, empleados y obreros, debemos a una sola voz, plantear los reclamos hasta lograr la consecución de nuestras aspiraciones.
Ese amalgamamiento, quedó patentado en la emotiva asamblea realizada en el Aula Maga en pasado miércoles 29, convocada el Comando Intergremial, a la que asistieron federaciones universitarias de todo el país En ella lo determinante fue el acuerdo de no cejar en la lucha por lograr la aprobación del Convenio y que de no lograrse nada satisfactorio, radicalizar el movimiento de protesta a nivel nacional, fijando para ello el 15 de mayo como la “HORA 0”.
