El Arzobispado de Caracas

Cardenal Baltazar Porras

La crónica menor

EL ARZOBISPADO DE CARACAS

Mons. Baltazar Enrique Porras Cardozo

Se afirma con frecuencia que la elevación de la sede episcopal de Caracas a arzobispado selló la unidad del territorio venezolano antes de la Independencia. Todo parecía indicar que la política llevada a cabo por los soberanos Carlos III y Carlos IV respondía a un proyecto que culminaba con la unidad eclesiástica.

La verdad histórica es que la creación de la intendencia, la capitanía general, la real audiencia y el real consulado respondieron a un plan reordenador de algunas provincias americanas. En el caso del arzobispado fueron las circunstancias de la  política internacional de España lo que la obligó a crear nuevos arzobispados por el aprieto de ceder territorios insulares que le pertenecían a otras potencias. Tal es el caso de Caracas.

El arzobispado de Santo Domingo fue el primero y primado de América. Para finales del siglo XVIII tenía como sufragáneas los obispados de La Habana, Santiago de Cuba, Puerto Rico, Luisiana, Caracas y Guayana. Por el Tratado de Basilea la corona española estipulaba el paso a Francia de la parte española de la isla caribeña “con los cañones, municiones de guerra y cuanto hubiese reunido en dicho territorio para su defensa”. En el tratado quedaba establecido que en el plazo de un mes desde que se supiera la noticia en la isla, España tenía que desalojar su territorio.

Todos los organismos oficiales fueron desmantelados. Muchos españoles incluido el arzobispo, salieron a toda prisa, sobre todo a Caracas y La Habana. Se planteaba el problema de la adscripción de las sufragáneas. El Consejo de Indias elevó una consulta al rey, pues al suprimirse la mitra dominicana las sufragáneas quedaban en el aire. El Consejo consideró oportuno dividir las sufragáneas de Santo Domingo entre México y Santa Fe. Al primer quedarían adscritos los de La Habana, Cuba, Puerto Rico y Luisiana. Al de Bogotá Caracas y Guayana.

La Bula de elevación a arzobispado fue expedida en Santa María la Mayor de Roma, a 24 de noviembre de 1803, por Su Santidad Pío VII. En ella se expresa haberse hecho esta erección a instancia del Rey Carlos IV, con motivo de haberse cedido por Su Majestad a la República de Francia la isla de Santo Domingo, donde está la Metrópoli a que correspondía esta diócesis y le fueron asignadas como sufragáneas Mérida de Maracaibo y Guayana.

La Bula y la Real Cédula se obedeció en Caracas el 15 de noviembre de 1804 quedando desde entonces como sede arzobispal metropolitana.

 

13.- 9-3-13 (2512)