La falta de información es innegable. Los datos de casos clínicos confirmados de fiebre tifoidea en Venezuela sin que haya un reporte oficial con recomendaciones y medidas de prevención, han alarmado a la colectividad, por lo que el epidemiólogo, Ángel Orihuela, recomienda al Gobierno que cumpla con la notificación obligatoria al respecto, que es un principio internacional.
El especialista, quien fue ministro de Sanidad en 1992, insistió que a eso se debe sumar una intensa campaña mediática con las acciones que todos los ciudadanos deben emprender para erradicar lo que denominó como un rebrote endémico.
Las cifras de Orihuela dan cuenta de entre 20 a 27 casos confirmados de fiebre tifoidea con muestra de cultivo en sangre o heces donde crece la bacteria. “El brote hasta ahora es pequeño… Pero existe el riesgo de que se transforme en algo más grave”, dijo durante su participación en el Twitter Spaces de El carabobeño de este miércoles 9 de noviembre.
La fiebre tifoidea se mantenía en Venezuela como una enfermedad endémica con cifras muy bajas. “Cuando estuve como ministro en 1992, se reportaron 24 casos en todo el país en un año, ahora hay 27 que se han detectado en el transcurso de unos seis días”.
Aseguró que esto significa que hay un brote que, por muy pequeño que sea, deber ser investigado para erradicarlo, y hay metodologías para hacerlo.
Hasta ahora, el mayor porcentaje de estos casos de fiebre tifoidea se presentó en Caracas, seguido de Carabobo y hay algunas sospechas en ciudades como Maturín, Barcelona y San Carlos.
Y aunque todos ellos fueron tratados y están sanos, Orihuela advirtió que se debe dar con los portadores sanos. “Eso está en fase de investigación… Se dice que los contagiados estuvieron en un festival y comieron en lugares específicos”.
¿Qué es la fiebre tifoidea?
Ante la incertidumbre que se ha desarrollado, la epidemióloga Gianmary Miozzi, durante el Twitter Spaces de El Carabobeño, señaló que es importante que la colectividad esté informada y alerta, pero sin alarmar sobre esta enfermedad que es ocasionada por la bacteria Salmonella Tiphy.
Se trata de una enfermedad sistémica grave que “es de transmisión fecal y oral a través de alimentos o agua contaminada”.
No se manifiesta con un único síntoma sino con fiebre muy alta, mucho dolor abdominal, malestares gastrointestinales como diarrea, y hasta brotes en la piel en forma de manchas rojas o rosadas.
Orihuela indicó que al no tratarse oportunamente la bacteria puede expandirse por todo el organismo y ser potencialmente mortal, “por eso hay que andarle rápido”.
¿Cuándo acudir al especialista?
Lejos de alarmar, los especialistas insistieron que hay que estar atentos, principalmente, a síntomas claves de la fiebre tifoidea, como la temperatura corporal muy alta e intenso dolor de cabeza. También hay que conocer sin en la comunidad o el entorno al que se frecuentó o visitó recientemente, hay alguna persona con malestares similares.
“Al tener fiebre más elevada de lo usual e intenso dolor de cabeza debe ir al médico porque eso significa que está le fase inicial de la enfermedad… En el día 30, al mes de estar enfermo, el paciente se puede complicar con signos de gravedad como hemorragia y perforación, lo que significaría que debe ir a terapia y, muy probablemente, a cirugía”.
En el país se cuenta con tratamientos muy eficaces que curan al 100 % la enfermedad. “Sería una negligencia que no ocurra de esa manera”.
Factores de riesgo
Al ser una infección bacteriana de contagio fecal y bucal, el mayor foco de riesgo lo representa el consumo de agua y alimentos contaminados.
“No solo se trata de que no sean bien lavados, sino que esa higiene se haga con agua que no está debidamente tratada, como ocurre en muchas partes del país”. También representa un riesgo el desbordamiento de aguas servidas que suelen mezclarse con las blancas. “Solo por poner un ejemplo, en Caracas hay 18 mil botes de aguas negras en las calles”.
Con esta realidad, las lluvias e inundaciones constituyen otros elementos que ameritan especial atención.
Recomendaciones
Los especialistas detallaron que lo más importante para prevenir la fiebre tifoidea es hervir el agua de consumo humano, así como el que se usa para lavar los alimentos y los utensilios de la cocina.
También se debe evitar comer alimentos crudos, como tomate y lechuga y cualquier otro al que no se le quite la corteza y no pase por un proceso de cocción. A esto se agrega no ir a lugares de expendio de comida que no respeten las normas de higiene.
Miozzi insistió en la necesidad de no automedicarse y el uso indiscriminado de antibióticos que pueden provocar resistencia a los medicamentos. Resaltó que la detección debe hacerse con hemocultivo y coprocultivo para evitar diagnósticos errados.
10-11-2022