Por: Angélica Villamizar…
En Mérida la prestación del servicio de gas doméstico por parte de las compañías responsables del suministro tanto públicas como privadas sigue siendo deplorable, debido principalmente, a la mala gestión en toda la cadena del sector hidrocarburo, lo que ha originado el aumento significativo de la escasez del mismo en lo que va del año 2021.
Ya son pocos los fogones de leña que son usados para poder cocinar un poco de alimentos y así no pasar el día sin comer, porque la leña también está escasa, ya ni los artefactos eléctricos se pueden utilizar por las constantes fallas de electricidad que volvieron a arreciar.
Un mundo de irregularidades afecta el buen funcionamiento del servicio; comenzando por casos de corrupción por parte de quienes son responsables de gerenciar, la extracción de gas para revenderlo a precios elevados, la poca flota de transporte para el traslado del gas a pesar de que representantes de autoridades nacionales han anunciado la recuperación de algunas gandolas, sin embargo, hasta los momentos no se han visto activadas.
Hablan del bloqueo económico como responsable de la escasez de gas que existe, siempre en búsqueda de culpables sin querer asumir el mal manejo del sistema, además de que se cuenta con una sola fuente de distribución y que no se tiene la producción suficiente para satisfacer la demanda.
A raíz de toda esa situación, durante los primeros meses del año, las autoridades comenzaron a informar sobre algunos planes para el mejoramiento del servicio, comenzando con la instalación de una junta interventora, pusieron a disposición de las comunidades un correo electrónico para realizar denuncias, prohibieron la venta del gas en divisas, acordaron los precios establecidos para cada tamaño de cilindro y a granel, bajando considerablemente los montos que se venían cobrando por cada uno de estos, entre otras acciones.
Y pese a todo eso aún no se ha mejorado la situación, a pesar de que en varias comunidades se ha realizado operativos de venta por parte de la empresa pública, pero se ha sentido la ausencia por parte de las empresas privadas que venían prestando la venta por lo menos cada quince días, por lo que algunas comunidades han denunciado la escasez del gas.
Los padres y madres cansados de pasar meses sin gas doméstico, desesperados por no tener dónde cocinar sus alimentos, han recurrido de nuevo a las protestas para exigir respuestas y soluciones, manifestaciones que han sido dispersadas por efectivos policiales, con la falsa promesa que pronto serán atendidos o en algunas ocasiones bajo la amenaza de suspender la prestación del servicio.
Se espera que pronto se solucione esta problemática que sigue afectando la calidad de vida de los merideños, y más en estos tiempos de pandemia, cuando lo que se requiere es mantener por lo menos, la paz mental para poder enfrentar las dificultades propias de la realidad que se vive actualmente en el país.
Correo: amvs286@gmail.com
29-04-2021 (42)
