Tokio 2020 y sus medidas para evitar el contagio masivo de covid-19

El próximo 23 de julio se dará inicio a una nueva edición de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, su trigésima tercera edición (XXXIII), en la cual participarán cerca de 205 naciones y más de 11.000 atletas en 33 disciplinas distintas.

La justa olímpica se realizaría el pasado año 2020 durante la misma fecha. Sin embargo, la pandemia por covid-19 obligó a la suspensión de todos los eventos deportivos a escala global.

Ante este nuevo escenario, el comité organizador se vio obligado a reformar y reforzar las medidas de seguridad sanitarias para la protección de los atletas, así como del personal que labora en las diferentes instancias de la Villa Olímpica y centros deportivos.

Japón es una nación de 120 millones de personas, pero a pesar de su sobrepoblación también es uno de los países del mundo menos afectados por la pandemia de coronavirus con 828.201 casos y 14.943 muertes. Sin embargo, las alarmas se encendieron a escasos días de iniciarse los juegos, luego de que Tokio registrara un nuevo repunte con 1.308 casos diarios de covid-19; la cifra más alta en seis meses.

La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, informó que la mayoría de los enfermos graves y hospitalizados son personas que rondan los 50 años y jóvenes, los cuales continúan excluidos del plan de vacunación.

Por su parte, y en defensa de la justa deportiva, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, ya se comprometió a “no traer ningún riesgo al pueblo japonés” con los juegos, en momentos en los que la opinión pública nipona sigue viendo la cita olímpica como un potencial acelerador de la pandemia en su país.

Así lo dio a conocer una encuesta publicada por la consultora Ipsos, donde señala que el 78% de los japoneses se opone a la celebración de este magno evento deportivo.

Una nueva suspensión, o el adiós definitivo, representaría un profundo golpe económico para el país anfitrión: los de Tokio son ya los juegos más caros de la historia. Según las cifras oficiales dadas a conocer en diciembre pasado, su costo superaba los 15.000 millones de dólares, lo que representa el doble de lo calculado cuando se otorgó el torneo a Tokio en 2013. No obstante, una auditora nacional calcula que el gasto sobrepasará los 26.000 millones.

Medidas anticovid-19

Una de las medidas que sería implementada por el comité organizador es la ausencia de público de países extranjeros en los 339 eventos del torneo deportivo. Sin embargo, se permitiría el ingreso de espectadores locales a los centros deportivos: un máximo de 10.000 personas.

A pocos días para el inicio de la justa olímpica, el gobierno de Japón decretó estado de emergencia ante el repunte en los casos de covid-19 en el país, lo que obligó a tomar la decisión de celebrar el evento internacional sin espectadores locales.

El actual estado de emergencia en la capital es el cuarto declarado desde el inicio de la pandemia y se encuentra vigente desde el pasado 12 de julio y hasta el 22 de agosto, coincidiendo con la celebración del evento deportivo internacional cuya apertura está prevista para el 23 de julio.

Entre las medidas especiales se encuentra también la solicitud a los más de 11.000 atletas de la realización de la prueba PCR contra la covid-19 antes de salir de su territorio. Las delegaciones deben presentarse en sus sitios de hospedaje con cinco días de anticipación.

Además, en lugar de aplicar una prueba al menos una vez cada cuatro días -tal y como se anunció en el reglamento publicado en febrero-, los deportistas serán sometidos a la prueba del hisopado todos los días bajo vigilancia extrema.

En la villa olímpica principal, así como en las dos villas satélites en las que se hospedarán los atletas de ciclismo y vela (donde ya ondean las banderas de varios países), se han establecido las llamadas “burbujas”, en un esfuerzo por mantener el virus bajo control.

Aunque la vacunación no es obligatoria, se espera que el 80% de los atletas acudan ya vacunados a los juegos.

Autoridades señalaron que el uso del tapabocas es obligatorio para los deportistas, quienes además deberán desplazarse a los recintos donde competirán en vehículos designados. No se permitirá la circulación turística en ningún punto de la ciudad.

De la misma manera, Japón solicitó a las federaciones deportivas y a los comités olímpicos de cada nación reducir el número de oficiales que participarán en la organización. En este sentido, el anfitrión planea reducir el número de estos encargados a un total de 78.000 en el marco de las medidas preventivas.

A pesar de dichas medidas, expertos médicos temen que las mismas no sean suficiente ya que el continuo movimiento de personal durante la celebración del evento puede dejar muchos resquicios para la propagación viral.

Países con variantes de covid-19

También se conoció que el Gobierno japonés aplicará medidas adicionales a los deportistas de 11 países, especialmente India, Afganistán, Nepal, Pakistán, Sri Lanka, Brasil y Reino Unido, donde se han visto nuevas variantes del covid-19.

Los atletas y los miembros de los equipos de estos países deberán realizarse una prueba todos los días durante la semana previa a su llegada a Japón. También se les prohibirá establecer contacto con los atletas de los demás países durante tres días tras su llegada a Japón.

Ceremonia de premiación

Otro de los cambios significativos para esta edición de los Juegos Olímpicos será la ceremonia de premiación o imposición de medallas. Así lo dio a conocer el presidente del COI, Thomas Bach, quien explicó que los medallistas recibirán sus preseas en la mano y ellos mismos serán los encargados de colgarlas de su cuello.

«Las medallas olímpicas no se pondrán alrededor del cuello de los ganadores, sino que se entregarán al deportista en una bandeja y entonces el deportista se la pondrá», dijo Bach, al tiempo que agregó que la persona encargada de trasladar la bandeja debe estar equipada con guantes desinfectados para que el deportista pueda estar seguro de que nadie la tocó antes que ellos.