Hoy miles de personas propios y visitantes llegan atravesando los montes y valles andinos hasta la ciudad de La Grita en el estado Táchira para acompañar en procesión la imagen sagrada del Santo Cristo del rostro sereno.
Una tradición religiosa que año tras año toma más fuerza y son más los creyentes que de generación en generación piden con fervor al Cristo de Los Milagros y agradecen por favores recibidos.
Misas de para los peregrinos
Durante la madrugada del 6 de agosto día central del Santo Cristo de La Grita se comenzan a celebrar misas para los peregrinos que a cada instante van llegando al Santuario ubicado en la vía principal de La Grita, desde la 01:00 a.m. también a las 03:00 a.m, luego a las 05:00 a.m. y la última eucaristía a 06:30 a.m. Después de estas eucaristías no se efectúa ningún acto litúrgico, pues se debe realizar el traslado del Cristo junto al altar para la celebración de la Misa Central, que se tiene previsto se realice a las diez de la mañana.
La Procesión con el Cristo del rostro sereno
La procesión de subida del Santo Cristo hacia la ciudad de La Grita se realiza a las dos de la tarde, una vez concluida la misa central.
Descalzos pagando promesas, con rostros cansados pero movidos por la Fe, son miles las personas que acompañan el largo recorrido de la imagen que parte desde el Santuario construido en el año 2007 donde se refugian los peregrinos para escuchar la Misa Central hasta la Basílica del Espíritu Santo.
El Cristo que desde hace 406 años protege a los Tachirenses es llevado en hombros durante más de 6 horas por las principales calles de la ciudad de La Grita, en el recorrido son innumerables las muestras de cariño y Fe de quienes habitan y visitan la Atenas del Táchira.
Familias enteras se organizan en las calles para adornar y alabar al Cristo amoroso en su paso, además de brindar posada y alimentos a los peregrinos que desde otros puntos geográficos y muchas veces solo movidos por la Fe llegan hasta esta tierra para visitar al pastor del pueblo tachirense.
JQ