***La hazaña del tovareño aún se mantiene como el único juego de su naturaleza dentro de los Mets de Nueva York
Son muchos los hitos conseguidos para Venezuela por el zurdo Johan Santana a lo largo de su exitosa carrera en el beisbol. Es el único lanzador criollo en conseguir 20 triunfos durante una temporada regular de Grandes Ligas y es el único escopetero venezolano que ha conseguido hacerse con la triple corona del pitcheo; entre otros. Hoy nos ocupa conmemorar el aniversario número 11 del primer juego sin hits ni carreras ejecutado por un abridor en la historia de los Mets de Nueva York.
Viernes 01 de junio del año 2012. Los registros de aquel día indican que al moderno Citi Field de Nueva York asistieron 27.069 aficionados y que el partido duró dos horas y treinta y cinco minutos. Sin embargo hay muchas cosas más que rescatar de aquella fantástica noche. Nunca antes dentro de esa organización algún lanzador había conseguido alinear los complicados factores o elementos que se requieren para una gesta de tal envergadura. Serían los aquilatados Cardenales de San Luis las víctimas del venezolano Santana. Con un marcador final de ocho carreras por cero el derrotado sería nada más y nada menos que el espigado derecho Adam Wainwright; pitcher que hoy día posee 197 victorias en el más alto nivel del juego.
Por los metropolitanos han pasado lanzadores de la más alta estirpe como Nolan Ryan, Tom Seaver, Pedro Martínez o Dwight Gooden; verdaderas leyendas sobre el morrito. Pero no fue sino hasta el 01 de junio de 2012 cuando en sus archivos pudo escribirse la historia del primer juego sin hits ni carreras del equipo. Esa noche se fueron en blanco jugadores de poder como Carlos Beltrán o Matt Holliday y también figuras estelares como el futuro miembro del salón de la fama Yadier Molina. Que un lanzador transite en solitario la ruta de las nueve entradas sin que le conecten al menos un imparable o sin que le anoten al menos una vez es algo realmente difícil de conseguir.
Esa noche los Mets de Nueva York no contaban en su alineación con jugadores de mucho cartel pero en jornadas así las cosas se dan sí o sí. Ese line-up era acaudillado por su capitán, el tercera base David Wright. Esa noche conectó un inatrapable, impulsó una carrera, anotó dos veces y tomó dos bases por bolas. El receptor Josh Thole, quien jugaría en Venezuela con los Leones del Caracas sería el otro miembro de la exitosa batería.
Al culminar el encuentro Santana mejoraría su récord esa temporada a tres victorias por dos derrotas. Aquellos 134 lanzamientos ejecutados por el dominante serpentinero venezolano lo encumbrarían hacia un lugar prominente dentro de la rica historia del equipo asentado en Flushing, Nueva York. En Tovar por su parte al poco tiempo de la proeza se dejaron ver algunas camisetas impresas con la frase “NO HIT-NO HAN”.
Luis Alberto Morales
01 de junio de 2023