Por: Giovanni Cegarra…
Bajo la sombra de la ya intolerable controversia política que se padece en el país, de la que Mérida, estado Mérida, Región Los Andes, no se escapa, estamos de cara a la temporada vacacional, ya tradicional por esta época del año, de la que no todos podrán disfrutar, como quisieran, habida cuenta de las secuelas de la actual cruda coyuntura socio económica política que se sufre a diario en todo el territorio nacional y mentiras no son, por sí alguno se atreve a decir, es lo contrario.
La madre naturaleza, el fin de semana próximo pasado, hizo gala de su majestuosidad, con la nevada que cubrió a Pico Espejo y la sierra paramera que bordea a Pico El Aguila, hoy denominado “Collado del Cóndor”, la que bien pudieron disfrutar a sus anchas, los grupos de turistas que transitaban por la zona, en la práctica de un turismo bajo resguardo, como lo dejaron saber algunos de ellos, a llegar a nuestra ciudad serrana.
Turismo de resguardo, ¿cómo así?, les preguntaba y su respuesta fue más clara que el canto de un gallo en la madrugada “claro amigo, viajamos previendo que consigamos gasolina, que se no se alborote el país con protestas, tranquen las carreteras, quedamos varados por ahí, ver como regresemos a nuestros hogares, truncadas las vacaciones al no poder llegar a la ciudad que queremos conocer y disfrutar”.
Que decir, la realidad “vivita y coleando”, imposible de negar y esconder, en estos tiempos de Dios, enrarecidos por el tema político que cansa, fastidia, que ya parece una especie de acoso colectivo y al que le caiga el guante que se lo plante, caiga al que le caiga y punto.
CNP. 2229
14-08-2024