El centro de Mérida, ciudad de los caballeros, está sumergida en total anarquía ante la falta de respeto y ética de sus ciudadanos, quienes han vuelto sus calles y avenidas en un mercado ambulante.
Esta situación se presentan en diferentes avenidas ubicadas en el centro de la entidad andina, en donde los puestos de venta de productos como alimentos, verduras y ropa, no permiten el paso peatonal y vehicular normal de una ciudad.
Así mismo, afectan el orden público, pues al estar ocupadas las aceras, las personas tienen que transitar por la avenida, corriendo el riesgo de causar o ser víctima de un accidente de tránsito.
También, los merideños son afectados por la delincuencia organizada. «Aquí roban a cada rato, sin importar si es hombre, mujer, niño o abuelos… Sobre todo los aparatos electrónicos, pero aún así se ve de todo», comentó una vendedora informal.
Por otro lado, los comerciantes denuncian que son pocos, «por no decir ninguno» los organismos de seguridad del Estado que están prestando sus servicios en el centro de Mérida, lo que promueve la violencia y delincuencia. Por: Valeria Castro, practicante Unica. / Foto referencial
