Monseñor Baltazar Enrique Cardenal Porras Cardozo, Arzobispo de Mérida y Administrador Apostólico de Caracas, en este inicio de la Semana Santa, con la conmemoración de la llamada «entrada triunfal del Señor Jesús a Jerusalén», pidió en su homilía que este Domingo de Ramos sea vivido con mayor profundidad, fe, pasión y reconcilio.
A través de los medios de comunicación nacionales, el Cardenal dijo que a pesar de todas las dificultades que el mundo padece, nuestro Señor Jesucristo, profeta nazareno, profeta de Galilea, viene a nosotros humilde y sencillo, invitándonos a tener paz y esperanza, especialmente ahora en donde el mundo sufre una pandemia mundial, confiandole a él todas las necesidades y angustia.
Hizo también referencia al ramo, o palma, bendito que nos hace palpable de la protección de Dios, que pide vivamos la Pasión del Señor y nos alejemos de todo el dolor, odio, violencia, traición, mentira, manipulación y pecado que se pueda tener. Por ello, manifestó, se debe recibir con alegría su servicio, propuesta de fraternidad y vida.
«El Profeta Nazareno, viene humilde, montado en una burrita a perdonarnos» comentó Monseñor, quien se refirió al texto del evangelio de este 5 de abril, diciendo que debemos perdonar para ser perdonados así como lo hizo Jesucristo cuando asumió la traición de su amigo Judas, el abandono de los apóstoles, el temor de Pedro y la rabia de los sacerdotes. Redacción CC