El profesor Alfredo Angulo, decano de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad de Los Andes, desde el programa La Ciudad En La Radio, rechazó la imposición del gobierno nacional de asignar, mediante la Oficina de Planificación del Sector Universitario, el 100% de los cupos en las universidades públicas, incluyendo la ULA.
Angulo calificó tal decisión del gobierno como parte de una política anti-universitaria que atenta con la autonomía de las casas de estudios y añadió: “Esto no es una realidad que recién inicia, sino que es una fase que forma parte de un proceso mayor”.
“Debemos hacer auditorias de las condiciones socioeconómicas de nuestros estudiantes para demostrar que son de clase media en general”, afirmó ante las acusaciones que en la universidad se niega el acceso a la educación a las personas de escasos recursos.
“Debemos demostrar que la universidad tiene pertinencia social. Hay programas sociales que no pueden ser invisibilizados, como por ejemplo el programa Fray Juan Ramos de Lora”. “Nosotros no somos una universidad oligárquica”, asintió.
Asimismo declaró: “EL CNU-OPSU ha demostrado una enorme ineficiencia durante años cuando asignan los cupos, porque esos cupos quedan disponibles. No se llenan porque las familias no tienen los recursos económicos para enviar a los estudiantes a estudiar”.
“Una cosa es el ingreso y otra cosa es el acceso”, añadió.
Angulo también afirmó que “esta política de asignar 100% las plazas por parte del ministro va a dar lugar a muchísimas injusticias e irregularidades”. Advirtió del peligro de que se niegue el mérito y que estudiantes provenientes de escuelas privadas con buen promedio queden sin entrar a las universidades públicas.
Además señaló que la asignación de la totalidad de los cupos por parte del gobierno nacional acarrea el peligro de que “sirve de cubierta, de traje bonito, para encubrir criterios extraacadémicos de orden políticos, de militancias ideológicas que van a afectar la calidad de la enseñanza”. Angulo enfatizó: “¿Cuántos profesores tendrían que auto-censurarse para dar clases frente a gente que entró a la universidad por criterios de militancia política o por criterios ideológicos?”
Ante eso, el decano afirmó que “la institución universitaria debe ejercer la autonomía, y la autonomía en primer lugar significa libertad de lo que enseña, cómo se enseña y a quienes se va a enseñar”. “Estamos en presencia de un paso eventualmente que significaría el puntillazo letal para la existencia autonómica de la universidad”, añadió.
A su vez, Angulo denunció: “Aquí se está afectando el numeral 9 del artículo 26 de la Ley de Universidades, que dispone que el Consejo Universitario fije el número de alumnos que deben ingresar”.
Señaló además que las capacidades de las universidades públicas no son suficientes para todos los egresados de bachiller y alertó: “Cuando en una universidad empiezan a haber salones de clases en donde los estudiantes estén recibiendo clases sentados en el piso, esa es una universidad que entra en decadencia”.
En relación a las declaraciones del gobernador del estado Mérida, Alexis Ramírez, quien el pasado 21 de mayo afirmó en rueda de prensa que el “Núcleo Liria es un santuario de delincuentes”, Angulo declaró: “En nada contribuyeron a la necesaria pacificación de los espíritus, la reconciliación, encuentro y dialogo que él en un par de oportunidades nos prometió querer tener con la universidad”.
Señaló que el pasado lunes los decanos del Núcleo Liria ULA rechazaron en un comunicado tales afirmaciones de la autoridad regional. “No formamos delincuentes y hemos dicho que el gobernador debe saberlo porque él es egresado de la ULA e incluso es alumno de postgrado”, sentenció.
Al ser abordado sobre por qué la Facultad de Humanidades y Educación ha sido la única de la ULA hasta ahora en decretar el estado de emergencia, el decano aseveró que “es un error pensar que hay que jugar a la normalidad” y que en la facultad incluso se han dejado de publicar diversas revistas debido a la deficiencia presupuestaria. “La existencia de la crisis es real”, apuntó.
En relación a las actividades de la Intergremial Universitaria, Angulo expresó su apoyo a gremios ulandimos y advirtió a la colectividad: “No hay paro indefinido. Quienes leen la Hora Cero literalmente como si fuera el apocalipsis, están haciendo una lectura equivocada.
Vamos a dar la pelea, pero no vamos a paralizar totalmente la universidad”. Asimismo manifestó su apoyo al presidente de la Asociación de Profesores de la ULA, profesor Luis Loaiza Rincón, quien es dirigente de la Intergremial.
Angulo llamó a la Comisión Estratégica Para la Defensa de la ULA a “pensar, diseñar, y elaborar políticas que nos permitan actuar racionalmente de cara al futuro”. Concluyó con estas palabras para toda la comunidad universitaria: “El llamado es que no existirá la universidad si no nos comprometemos activa, moral y políticamente en su defensa”.
Josué Barrios – Pasante UNICA