Por Andrés E. Mora M…
La Federación Venezolana de Fútbol (FVF), desde hace casi una década, ha hecho denodados esfuerzos para que las truculentas y enrevesadas historias vividas en sus entrañas sean divulgadas al público a través de novedosas puestas en escena o creativos sketches con la finalidad – muy loable por cierto, sería mezquino no reconocerlo – de llenar el enorme vacío dejado en estas tierras por las compañías productoras de «culebrones», como se le conoce coloquialmente a las telenovelas en el país. Sin embargo, y muy a su pesar, la FVF todavía se encuentra algo lejos de su objetivo, ya que aún no alcanza el impacto que en la audiencia tuvieron aquellas. No obstante, sus avances han sido extraordinarios.
Recordemos, antes de referirnos a los progresos de la FVF en su intención de llenar aquel vacío, que la producción de telenovelas en el país fue una de las tantísimas industrias reconocida por su éxito y prosperidad – creadora de riquezas y bienestar en el país al generar miles de empleos y exportar su producto a decenas de países – que, lamentablemente, sucumbió ante la «pesadilla roja-rojita» que se entronizó en nuestra hermosa nación hace 24 años.
Al igual que la destrucción de PDVSA, que se inició con la orden del presidente fallecido no se sabe cuándo – el “Pollo” Carvajal dice que fue en diciembre, aunque el régimen lo conmemora en marzo – de despedir a más de 18.000 trabajadores de la industria petrolera venezolana, para entonces la quinta productora de hidrocarburos en el mundo, por su participación en el paro petrolero…
… O del aniquilamiento de las industrias del acero y aluminio, ambas pilares fundacionales de las empresas básicas de Guayana, que comenzó cuando Sidor fue obligada a apagar dos hornos, Alcasa a desactivar las líneas de producción I y II y Venalum a sacar de servicio a 360 celdas de reducción, medidas, por demás absurdas y descabelladas, que entraron en vigencia a partir del 01-01-2010 como parte del programa de racionamiento energético establecido en la Gaceta Oficial No. 39.332, el inminente exterminio de la pujante industria productora de telenovelas tuvo su origen, también, en Miraflores.
Su «sentencia de muerte» fue anunciada el 28-12-2006 por el mismo individuo que ordenó las otras ya mencionadas cuando – en uno de sus acostumbrados arrebatos autoritarios y en el que, específicamente, le dio «rienda suelta» a su afán de imponer el aberrante proyecto de la hegemonía comunicacional que impulsaba – informó que no se le renovaría la concesión a RCTV (el mayor productor de «culebrones» de estos lados del planeta) para que siguiera emitiendo en señal abierta “por estar al servicio del golpismo”
La tiránica decisión – flagrante violación de la libertad de expresión, derecho humano fundamental consagrado en el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos – se ejecutaría en la medianoche del 27-05-2007. Pero, eso no quedaría ahí. El nacido no se sabe en dónde, siguiendo los pasos de su predecesor, sacó de la programación de las «cableras» la señal internacional de NTN24, CNN en Español, TV Azteca, Todo Noticias, Caracol TV y RCN Colombia. Además, la «neodictadura venezolana», entre 2003 y septiembre de 2022, cerró al menos 233 emisoras de radio, de acuerdo a la ONG Espacio Público. Asimismo, 70 periódicos, por la medida pequeña, han dejado de circular. Por supuesto, los portales de noticias no podían encontrarse exentos de censura. Alrededor de 16 estaban bloqueados a finales de noviembre-2021, según el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) – ONG que trabajaba en la promoción, defensa y formación en libertad de expresión, periodismo de investigación y derecho a la información – y que al día de hoy no le ha sido cambiado el estatus. No estaría de más agregar, que las ONG serán las próximas víctimas del insaciable autoritarismo del autocrático régimen usurpador.
Dicho esto, volvamos al inicio del Big Ben: los «culebrones made in FVF». Motivo o razón que nos trajo hasta acá.
Quizás, la actuación más recordada de la FVF – que la hizo saltar del cuasi-anonimato a la (mala)fama internacional – fue la participación de su presidente, Rafael Esquivel, en la “superproducción” mundialmente conocida como “FIFA Gate”.
En ese interminable «culebrón» estrenado el 27-05-2015, con Zúrich como locación del inesperado primer capítulo, y que todavía continúa «al aire», el que fuera el mandamás del fútbol venezolano por 28 años tuvo un papel protagónico en la trama de soborno, fraude y lavado de dinero develado en los primeros meses de «transmisión», lo cual enganchó a público en todos los confines del planeta, batiendo récords de «sintonía».
A partir de entonces, la FVF se dedicó a la producción de «culebrones» domésticos. “Motín a bordo”, «filmado» en la época de “Chita” Sanvicente como DT Vinotinto fue, por ejemplo, uno de ellos. Sin embargo, con el «culebrón» “Paguenle a Peseiro”, la FVF volvió a tener (mala)proyección internacional. En esta oportunidad como una institución tramposa y mala paga.
Lo más reciente de la Federación es una producción venezolana-argentina cuyo guión, lastimosamente, sufrió un cambio abrupto en el transcurso de la «grabación», al extremo de que un «actor de reparto» se convirtiera en protagonista.
El susodicho, quien es representante de Pekerman, considerado por el laureado DT como su mano derecha, y «pana» de Gimenez, según se desprende de unas declaraciones dadas por el propio presidente de la FVF, habría abusado de la confianza de ambos – y del “cria (mala)fama y acuestate a dormir” que estigmatiza a la FVF y «potabiliza» la versión de los incumplimientos por parte de la federación criolla – para, presuntamente, cometer irregularidades administrativas.
Así las cosas, “El Rasputín de don José” será el título del nuevo «culebrón» vinotinto… Entretanto, la FVF, organismo que, por cierto, se «hace un flaco favor» al guardar silencio con respecto a algunas situaciones inaceptables ocurridas desde la pasada temporada en la Liga FUTVE, sigue apostando por una «producción» venezolana-argentina y contrata al “Bocha” Batista …
Prof. Titular jubilado ULA – Cronista deportivo
aemora@gmail.com, @amoramarquez
11-03-2022
