Por Andrés E. Mora…
A Ingenuo Sinduda, embelesado con la lectura de la “Biografía de Andrés Eloy Blanco” magistralmente escrita por Alfonso Ramírez, “el cronista de Tovar”, le ha dado la madrugada, sin darse cuenta, inmerso aún en sus cautivantes páginas a pesar del acecho de la oscurana – ¡Ejemplo de la vergonzosa Venezuela Potencia chavo-madurista! – mantenida a raya por la luminosidad del bombillo LED recargable que un colega le prestó por seis meses, tiempo que permanecerá “matando tigres”, según dijo, en una universidad extranjera. Mientras, Incredulina, su pareja inseparable, imperturbable, se encuentra plácidamente dormida a su lado.
Son las tres de la mañana y el cansancio hace mella en nuestro buen amigo, cediendo ante la terca insistencia de la somnolencia, justo cuando finaliza la lectura de la reseña que en la obra se hace del romance escrito por “el poeta del pueblo” para homenajear a Daniel “Chino” Canónico, figura descollante de los “Héroes del 41”, a su regreso de La Habana encabezando la selección criolla recién coronada campeona del mundo de béisbol amateur. En tales circunstancias, con Morfeo, el dios de los sueños, como singular testigo, se entabla, en versos y en la entelequia de lo quimérico, un corto pero fascinante diálogo entre el profesor jubilado de la ULA y el creador del legendario “Juan Bimba”:
¿Qué opinión te merece, mi estimado Andrés Eloy
cuando en el “pitching box” venezolano,
desde hace más de seis años
se ha montado un lanzador
que además de despótico tirano,
ahora es también usurpador
que a tu querido “Juan Bimba”
a “poncharlo” con saña se ha dedicado
dejándolo sin agua, ni comida
sin gas, medicinas, ni electricidad
fulminándole sus colegios y hospitales
así como su autónoma universidad
y hostigándolo con colectivos
que gozan de impunidad?
El repertorio del fulano pitcher
de sospechosa nacionalidad,
ya que su partida de nacimiento
no se sabe dónde está,
lo conforman tres lanzamientos
que han sido letales de verdad:
la heredada “rabo e’ cochino”,
con la que corrompió a la nación
triquiñuela iniciada por el que lo precedió,
un “cutter” bien afilado, mejor que el de Mariano,
con el que ha “guillotinado” leyes y Constitución,
y un “cambio” fundado en amaños y bajos engaños
que viola flagrantemente los derechos humanos
El “hijo ilustre de Cumaná” – a 64 años de su luz, el próximo 21 de mayo – hombre polifacético y de pensamiento universal, que entre muchas otras cosas fue insigne poeta y ensayista, aparte de abogado, político y tribuno excepcional, que enfrentó a dictaduras y fue tenaz aliado del pueblo – su “Juan Bimba” y fuente de inspiración – le recita una respuesta a Ingenuo, por demás contundente por lo optimista:
Después del prolongado “slump”
con “ponche” y “ponche” a cada rato
“Juan Bimba” comenzó hacer contacto
y a ligar con fuerza sus batazos
gracias a las instrucciones acertadas,
del nuevo coach de bateo,
especialista en descoser picheos,
quien el 23 de enero asumió el cargo
Ante los estacazos de todo los calibres,
jonrones, dobletes, triples y sencillos,
que silbando salen del bate renacido,
el “serpentinero” usurpador,
que se sabe ya perdido,
comenzó a lanzar pegado
para a “Juan Bimba” amedrentar,
apoyado por los írritos TSJ y Fiscalía General,
el desprestigiado Sebin
y la corrupta cúpula militar,
para expulsarlo del juego
apenas comience a reclamar
por los lanzamientos a la cabeza
con los que lo quieren desconcertar
Pero se equivoca el usurpador
porque lo de “Juan Bimba” es indetenible
bateando por una Venezuela libre
que gestándose se ha venido
en este maratónico partido
de innumerables extra-innings
que en el círculo de espera tiene
al futuro prevenido.
Prof. Titular jubilado ULA – Cronista deportivo
aemora@gmail.com, @amoramarquez