El dilema de la seguridad energética europea: entre la sostenibilidad ambiental y la encrucijada geopolítica global

En el marco de la confrontación bélica que se libra en Europa, desde febrero de 2022, son varias las interrogantes suspendidas en el aire para enfocar este problema: la relación de interdependencia energética de los países de la Unión Europea (UE) con la Federación Rusa y, el imperativo de mantener a flote sus economías en lo referente a la legislación ambiental en materia de cambio climático.

De acuerdo a lo anterior, se pretende comprender la relación de codependencia energética entre los miembros de la UE, el impacto de la invasión a Ucrania en la seguridad energética, la distancia existente entre las legislaciones ambientales europeas y lo que impone la geopolítica global. Finalmente, es importante reconocer la necesidad de fortalecer el vínculo Atlántico con la Unión Europea, para poder disminuir la relación de codependencia energética con la Rusia de Putin.

( Becker & Åslund, 2024), ( Hajiyeva , 2024) (Pineros & Rayran-Cortés, 2023) describen la compleja situación de dependencia energética existente entre la Unión Europea y la Federación Rusa. En este sentido, desde el comienzo de la agresión rusa en los territorios del Dombás y Luhansk (2014), hasta la escalada mayor del conflicto en febrero de 2024, existe una discrepancia sobre dependencia energética europea. El gas ruso funge como el motor de la economía alemana, sobre todo en invierno. Al mismo tiempo, los países de Europa del Norte incrementan el consumo de gas para la calefacción de sus hogares. En está perspectiva, se genera un debate político, debido a que los europeos necesitan de los hidrocarburos de Eurasia, para el funcionamiento de sus economías; por otro lado, también se enfrentan a las exigencias de las legislaciones ambientales europeas (contrarrestar los efectos del cambio climático)

 (Fajardo, 2024) (Merino, 2022) establecen que son tiempos turbulentos para la región y a sabiendas que Ucrania es un lugar de paso del suministro de gas ruso, esto genera que el conflicto ruso-ucraniano, no solo por el temor de escalada mayor de conflicto, sino también conlleva incertidumbre sobre el suministro de energía, los cual trae consecuencias negativas para la economía global. La crisis ruso-ucraniana ha producido que los otrora países neutrales, Suecia y Finlandia, hayan tenido que mostrar una postura beligerante frente a las agresiones de Putin.

En Europa no se veían tiempos tan turbulentos desde el final de la Segunda Guerra Mundial. No obstante, es oportuno destacar que no todos los países de la UE tienen el mismo grado de dependencia energética con Rusia. Por ende, las decisiones que se tomen al respecto, no solo dependen de lo estipulado por el organismo europeo en este particular, sino también están sujetas a lo que disponga cada país en materia de seguridad energética. Al respecto, (Buisan, 2024) (Merino & Martínez , 2024) señalan que el país más vulnerable de Europa, en este sentido, es Alemania (tercera economía mundial según el FMI. En cambio, su vecino Francia[1], se muestra menos vulnerable, por contar con importantes sistemas termoeléctricos.

Con respecto a lo anterior, el gobierno alemán se encuentra con la problemática de haber sacrificado su proyecto termonuclear, para proteger a sus ciudadanos, aumentando la dependencia así la relación de interdependencia con Rusia. En función de ello, no solamente se condiciona su respuesta firme ante la agresión rusa en Ucrania, sino también conlleva replantearse la búsqueda de nuevas fuentes de energía.

Así mismo, se toma en cuenta la arista de la preservación del ambiente, a través de la implementación de políticas comunitarias en esta materia y la posibilidad de mermar la dependencia energética con respecto a Rusia. Esto marca un punto de inflexión, ya que la realidad geopolítica y los efectos de la guerra, contrastan con lo propuesto en el Acuerdo de París (2015) y lo estipulado en la Comisión Europea en el Pacto Verde (2020)[2] En este orden de ideas, Ursula Von Der Leyen, advirtió sobre la necesidad de acabar la dependencia energética con la Federación Rusa e implementar proyectos energéticos donde prevalezcan los principios comunitarios, en procura de la preservación del ambiente y la seguridad energética europea.[3] 

(Sanahuja, 2022) advierte de la necesidad de buscar espacios donde puedan aplicarse las políticas ambientales europeas, sin dejar de mirar de cerca la conflictividad generada tras la invasión rusa a Ucrania. Entre las consecuencias negativas de esta problemática, se encuentran: el aumento de la dependencia europea del gas ruso, el incremento de los precios en los combustibles, lo cual incide directamente en el aumento de los precios de bienes de consumo.

Finalmente, como se ha evidenciado, Europa se encuentra en una encrucijada, en medio del retorno del tablero geopolítico y las ambiciones desmesuradas de Putin. Desde ese punto de vista, las decisiones que se tomarán a futuro, no dependen únicamente de lo estipulado en la reglamentación ambiental, sino de lo que se desprenda de la compleja realidad geopolítica que viven los europeos en este momento. Igualmente, sería interesante promover por la vía de acuerdos entre la UE y los países latinoamericanos con reservas energéticas, estrechar los vínculos de cooperación en materia de hidrocarburos y otras fuentes de energía sustentables.

Bibliografía

Becker, T., & Åslund, A. (2024). The EU’s Dependence on Russian. En P. M. Ekman, The Borders . Estocolmo : Palgrave Macmillan . doi:https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-3-031-54200-8_7

Hajiyeva , N. (2024). En Una nueva arquitectura de seguridad en Europa. La estrategia de la Unión Europea (págs. 141-169). Barcelona: Cibod.

Buisan, M. (2024). Alemania en la encrucijada del cambio del modelo económico. Boletin Económico de ICE, 21-34. Obtenido de https://revistasice.com/index.php/BICE/article/view/7724/7802

Fajardo, T. (2024). La Unión Europea y la diplomacia del clima tras la agresión de Rusia en Ucrania. Revista UNICSI(64), 95-119. doi:DOI: http://dx.doi.org/10.31439/UNISCI-192

Merino, Á. (2022). El nuevo Orden Mundial . doi:https://elordenmundial.com/mapas-y-graficos/dependencia-energetica-union-europea/

Merino, P., & Martínez , J. (2024). Economía y geopolítica del secetro enérgetico. Desde los combustibles fósiles hasta los minerales en trasición. Economía y geopolitica de un mundo en conflicto, 107-121. Obtenido de https://revistasice.com/index.php/ICE/article/view/7795

Pineros, R., & Rayran-Cortés, M. (2023). La guerra en Ucrania: entre la seguridad, la geopolítica energética y las sanciones internacionales. Desafíos, 35, 1-29. doi:DOI: https://doi.org/10.12804/revistas.urosario.edu.co/desafios/a.13194

Sanahuja, J. (2022). Pacto Verde y geopolítica de la energía en una economía de guerra. Nueva Sociedad, 1-8. Obtenido de https://nuso.org/articulo/energia-europa-guerra/

[1] Francia ha logrado minimizar su dependencia gasífera, por el desarrollo de un eficiente sistema termoeléctrico basado en la energía nuclear.

[2] Véase: https://www.consilium.europa.eu/es/policies/green-deal/

[3] Véase: https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/es/ip_22_1511

Lic. en Historia Claudia Santiago

Profesora FACES-ULA

13-04-2025