Uno de los temas que ha inquietado mi pensamiento es sobre los problemas, sobre qué es un problema y como enfrentar lo que llamamos problemas.
En parte esa primera aproximación fue iluminada por dos psicólogos uno de ellos fue Paul Watzlawick (1921-2007) quien fue un psicoterapeuta austriaco que formó parte de la Escuela Interaccional de Palo Alto y el otro su discípulo Giorgio Nardone (nacido el 13 de septiembre de 1958) quien es el director de la Escuela de Postgrado de Psicoterapia Breve Estratégica, ubicada en Arezzo, Italia y de la Escuela de Formación Gerencial en Comunicación y Solución Estratégica de Problemas.
La otra fuente de iluminación fue aprender teoría de juegos (en el posgrado de economía),ahí han influido muchos autores, obviamente John Forbes Nash, Jr. (13 de junio de 1928 – 23 de mayo de 2015), Reinhard Selten (5 de octubre de 1930 – 23 de agosto de 2016), John Harsanyi (9 de mayo de 1920 – 9 de agosto de 2000), George Akerlof (17 de junio de 1940), Andrew Spence (7 de noviembre de 1943), Joseph Stiglitz (9 de febrero de 1943), Robert Aumann (8 de junio de 1930) y Jean Tirole (9 de agosto de 1953) entre otros premios nobel de economía en el área de teoría de juegos.
Por último, pero no menos importante, estudiando el cristianismo desde la inspiración de Luigi Giussani (15 de octubre de 1922 – 22 de febrero de 2005) aprendí la belleza de la vida y del camino que conduce al infinito. Él nos invita a vivir intensamente la vida. De estas perspectiva o enfoques uno de la psicología, otro de la economía y uno de la fe, entendí algo simple pero útil.
Como dice Don Giussani, “todos tenemos un común origen y un común destino, la diferencia lo hace el camino”. Pero ese camino esta plagado de situaciones, dichas situaciones pueden ser resueltas y otras no. Las situaciones que son posible de resolver son los problemas, con las otras tenemos que aprender a convivir. Los problemas en sí, son una medida de la vida, los muertos no tienen problemas, son los vivos quienes enfrentan problemas. Él nos dice que “una medida de la intensidad de la vida es la cantidad de problemas que afrontamos”.
En este punto donde debemos distinguir que tipo de situaciones enfrentamos y cuales son condiciones con las que tenemos que vivir. En mi caso son varias, por ejemplo, mi miopía y mi sordera. En el caso de la miopía puedo resolverlo con los anteojos o gafas y mi sordera con una operación o simplemente aceptar mi limitación auditiva.
Aquí entra Watzlawick, quien dice el arte de amargarse la vida, tiene como primera fuente, el no atender los problemas o tratar de resolver una condición que no tiene solución. Una segunda fuente de amargarse la vida se encuentra en tratar un problema en un nivel inadecuado. Es decir, nos amargamos la vida por no hacer el diagnostico adecuado. Esto significa confundir una condición con un problema y viceversa. En segundo lugar, nos amargamos la vida, al tratar el atender el problema de manera errada. En este punto la respuesta la tiene la teoría de juegos.
En la teoría de juegos, lo que se busca es ganar, ¿Y a quién no le gusta ganar? En los juegos se tienen reglas, acciones y premios o castigos. Las acciones se combinan con los momentos de actuar y dependiendo de las acciones y los momentos se pueden definir estrategias. En teoría de juegos las estrategias son los planes acción propios y ajenos y se busca tener la mejor respuesta dada la respuesta del otro. El resultado es un equilibrio de estrategias con un resultado que distribuye las ganancias o las pérdidas de acuerdo a las estrategias.
En teoría de juegos se aplica el teorema de Zermelo (Ernst Zermelo, 28 de julio de 1871 – 21 de mayo de 1953) que permite resolver la paradoja de Russell, que lo resumimos como “Mira hacia delante y resuelve hacia atrás”. Es decir, si ordenamos el juego adecuadamente podemos anticipar los probables futuros y tratar de seleccionar el futuro más conveniente, para escoger las estrategias iniciales que nos conducen al futuro más deseable al final del juego.
Si dada cualquier estrategia del juego actual no favorece para el resultado deseable, entonces la teoría de juegos y el enfoque de solución estratégica de problemas te dice que tienes dos formas de hacerlo favorable.
- Una forma de cambiar el juego es cambiando los premios o los castigos como resultado de juego y para ello debes tener amenazas o promesas que sean creíbles.
- La segunda forma de cambiar el juego es cambiando las reglas de juego.
En el juego estratégico de la política y de los negocios, se han tenido experiencias abundantes de ambas formas de cambiar el juego, utilizando amenazas, persecuciones o restricciones para movilizarse o difundir la opinión adversa y es decir las acciones del adversario (que los tiranos llaman enemigos) o simplemente crean leyes y reglas para impedir la existencia de los mismos y así crear monopolios de lo público y de lo privado, para evitar la competencia.
Las sociedades pasan por tiempos primitivos, sin embargo, al final construir una vida civilizada significa superar esa barbarie.
Douglas C. Ramírez Vera
Profesor IIES-ULA
17-11-2024
Comunicación Continua no se hace responsable de la información que contiene este mensaje y no asume responsabilidad alguna frente a terceros sobre su íntegro contenido, quedando igualmente exonerada de la responsabilidad de la entidad autora del mismo.