El martirio de las alcabalas móviles en Mérida

Lo que faltaba en la ya cotidiana penuria que afrontan y confrontan los habitantes de Mérida y Ejido, sufrir el angustiante y desesperante martirio de tener que sobrepasar las alcabalas móviles que montan en determinados sectores, los de la Guardia Nacional Bolivariana, en cuarentena radical, entorpeciendo arbitrariamente, el libre tráfico vehicular peatonal, sin son ni ton.

La mañana de este lunes ocho, los usuarios de la vía Ejido-Mérida, se han topado con una alcabala móvil por la Avda. Mons Pulido Mendez, a la altura de Pan de Azúcar, en la que los efectivos castrenses, paran los vehículos y unidades del transporte colectivo, muy valentones y groseros, generando una tranca e impidiendo la libre circulación vehicular, con esto de solicitar el salvoconducto  e indagar, hacia donde se dirigen, los que circulan por dicha avenida en el límite Ejido-Mérida.    

Si bien es cierto, que cumplen su papel de hacer cumplir la normativa de bioseguridad por lo de cuarentena radical, también es cierto, que ello no implica que obstaculicen el libre tráfico vehicular, a su libre antojo, abusando de su condición castrense, no sean rápidos en el procedimiento, generan desesperante tranca, de casi tres horas, haciendo perder tiempo a quienes madrugan para llegar a la hora, a sus lugares de trabajo y más a los que vienen en las unidades de transporte público, las que abordan, de una manera por demás intolerante, requiriendo el salvoconducto, no circulen abarrotadas de usuarios.

Dirían nuestros abuelos “bueno es el cilantro, pero no tanto” y en honor a la verdad, las alcabalas móviles que montan en Ejido y Mérida, nada resuelven, por el contrario, generan incomodidad innecesaria por lo extremo de las medidas que ponen en práctica los efectivos castrenses que, aunque no son todos, nada saben, de como tratar con público (Giovanni Cegarra, CNP.2229).

08-03-2021