Gobierno regional exhorta a representantes de los entes de seguridad a generar políticas en la materia

Sin respuesta de las autoridades competentes ante los robos de la autopista Rafael Caldera y sistema de riego de los Pueblos del Sur

Luego de la decisión del Ejecutivo nacional de inhibir la competencia sobre el Cuerpo de Policía del estado al gobierno de Ramón Guevara, a principio de año, los merideños padecen las consecuencias con hurtos significativos.

La declaración fue hecha por la primera autoridad civil, Ramón Guevara, en su acostumbrada rueda de prensa semanal, en la que fijó postura sobre el robo de los equipos del área de Cardiología del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula).

Este hurto a dicha área de salud perjudica tanto en el presente como en el futuro a los pacientes, dijo Guevara. Por ello, exhortó al comandante de la Zona Operativa de Defensa Integral (ZODI), general de división César Wilfredo Méndez, para que, de una vez por todas, se puedan generar planes en esta materia.

Agregó que la seguridad no tiene concepción ideológica, es un área que requiere de la participación de todos. “Estoy atado de manos, ya va más de un año donde las fuerzas policiales del estado no están bajo nuestra competencia, Mérida se encuentra a la deriva en materia de seguridad ciudadana”, dijo.

Recordó que se han denunciado dos hurtos de magnitud, como fue el de las 12 toneladas de cableado de los túneles, en la autopista Rafael Caldera, y el del sistema de riego de los Pueblos del Sur; ahora se suman a estos el área de Cardiología, sin obtener ninguna respuesta por parte de los organismos competentes.

Desmantelada

“Nos robaron las tuberías de cobre meses atrás, ahora tres computadores, los polígrafos, las grabadoras, el software, las tesis de grado y más de 200 investigaciones del área de cardiología”, narró el representante del área de Cardiología del Iahula, Carlos Guillermo Cárdenas, quien acompañó a la autoridad regional en la rueda de prensa.

Enfatizó que el grupo de electrofisiología arrítmica del Iahula era el único que había en Venezuela al servicio público, colocaban marcapasos y desfibriladores para pacientes adultos e infantes.

Señaló que son más de 104 personas quienes están a la espera de recibir un marcapaso en el Iahula, provenientes de diferentes estados del país. Prensa OCI /Gráficas: Fernando Moreno