Esta última semana de noviembre, dejó de existir el ingeniero forestal Henry Antonio Rodríguez, profesor por más de 50 años de la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales de la Universidad de los Andes (FCFYA ULA). Egresado el 12 de diciembre de 1968 en la promoción en honor a Jesús Bracho Barreto, formando así parte de una escuela única y pionera en Latinoamérica para su época.
Cursó su maestría en taxonomía y ecología de plantas del neo trópico en el Missouri Botanical Garden https://www.missouribotanicalgarden.org/ y Washington University en San Luis y realizó estudios de palinología y arquitectura foliar en el Smithsonian Institute de Washington DC en los EEUU de Norteamérica. https://www.si.edu/
Fue preparador y docente en la FCFYA ULA en las materias de botánica, dendrología, ecología, silvicultura, impacto ambiental y manejo de bosques. Profesor de post grado del Centro de Estudios Forestales en manejo de bosques, y de química de medicamentos en la Facultad de Farmacia y Bioanálisis ULA, además de asesor de múltiples trabajos de tesis, consultor de instituciones y otras universidades.
Es referido en numerosas bibliografías y trabajos de investigación y tiene en su haber dos especies del género Espeletia (frailejones) con su nombre, clasificadas por el reconocido botánico español José Cuatrecasas Arumi: El Libanothamnus rodriguensis (de los Pueblos del sur) y Espeletia rodriguensis (de la Carbonera). Botánico con quien cultivó una gran amistad por años, al igual que con Luis Enrique Ruiz Terán (a quien conoció subiendo el pico Humboldt) y Stephen Tillett (padre de la etnobotánica en Venezuela) quien fuera también director del Jardín Botánico de Caracas.
Una vida en altruismo de altura
Partiendo del interés en el montañismo desde adolescente asciende los principales picos de la Sierra Nevada Mérida. En su contacto con el Grupo de Rescate Venezuela participa en numerosas actividades junto a sus amigos Julio Lescarboura y Carlos Todd (padres del rescate SAR y el manejo de incendios forestales en Venezuela respectivamente) incluyendo rescate en alta montaña, naciendo así la idea de la creación del Grupo Andino de Rescate en 1971, www.instagram.com/grupoandinoderescate/ debido al accidente de Jorge Eduardo Burguera y otros montañistas que dejaron profundo dolor en la generación de entonces y a sus familiares, sumándose a ello los accidentes aéreos de la época en los Andes. Posteriormente es fundador del cuerpo de Bomberos Forestales ULA en 1976. Logrando en ambos casos las sedes físicas ubicadas en el campus universitario de la Facultad de Ciencias Forestales en los Chorros de Milla, mediante solicitud al decano de entonces Rafael Viloria Díaz y luego por gestión con el decano Pedro M. Pettit ante el rector Pedro Rincón Gutiérrez, aprobando así en Consejo Universitario la adhesión del Grupo Andino de Rescate a la Universidad de los Andes.
A lo largo de su vida participó en numerosas búsquedas SAR, desastres naturales y búsqueda de personas perdidas en Venezuela, Colombia, Ecuador y Brasil. Fue instructor calificado en numerosos cursos dentro y fuera de Venezuela, incluyendo el área de helitáctica.
El profesor Henry Rodríguez, fue además un ser humano con virtudes y defectos, como cualquier otro, siempre polémico, rebelde, irreverente, no se conformaba con lo fácil.. Pero no cabe duda que sembró, como el miembro fundador 001 del Grupo Andino de Rescate, como líder y guía desinteresado la semilla del altruismo en más de cinco generaciones, salvando vidas por encima de todo, descuidando hasta la propia. Dejó una impronta en la vida de sus estudiantes, sacando lo mejor de cada uno, exigiendo calidad y excelencia, desde su pasión por la ciencia y la academia. Como acucioso investigador, alimento la vocación de muchos sin saberlo, que hoy son referentes en distintas partes de este planeta.
Descase en paz, profesor. Mérida y sus bosques, han perdido a uno de sus hombres más valiosos en la ciencia y el rescate, que hoy vuela libre con las Cinco Águilas Blancas de Don Tulio Febres Cordero, paseándose entre Belén, el Espejo, Los Chorros de Milla, La Culata y la Sierra Nevada y hasta más allá, por Caparo, Uverito, Ticoporo….
Danitza Suárez Salas
Prensa Grupo Andino de Rescate 30-11-2024