Las celebraciones eucarísticas dominicales con presencia de fieles en la Arquidiócesis de Mérida, inició este 1 de noviembre con una sola misa en los alrededores de los templos.
Ante la pandemia por el Covid19, las iglesias a nivel nacional han permanecido cerradas, realizando la Santa Misa sin feligresía y transmitiendo la Palabra de Dios a través de los medios de comunicación. Por esta razón, con gran amor, fe y esperanza los merideños se trasladaron a las adyacencias de los templos a recibir el Mensaje Divino de Dios Nuestro Señor, quien invita a ser pacientes y misericordioso en medio de la pandemia.
En el Santo Evangelio según San Mateo (5,1-12), correspondiente a este 1 de noviembre, Dios nos invita a seguir alegres ante las dificultades. «Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos».
Cabe destacar que, el pasado 26 de octubre la Arquidiócesis mediante un comunicado, informó sobre el protocolo de bioseguridad que se debe mantener en cada iglesia merideña con el fin de garantizar las medidas sanitarias y así para evitar el contagio del SARSCoV2. Redacción CC
