Por: Gerard Páez Monzón…
El mundo acelera su marcha a posicionarse, lo antes posible, en el plano de esa pregunta presentada por el Presidente de los EEUU, Mr. George W. Bush, cuando su territorio continental fuera atacado por terroristas en el 2001. Mucha gente, por todo el mundo, criticó y rechazó esa propuesta, avanzada en el tiempo para la sociedad mundial, pero no para el líder y su nación democrática, responsable, y la de mayor libertad.
Tenía que venir de la vertiente del partido político Republicano de los EEUU. Muchos países están aprendiendo que la lástima es manipulada por el enemigo, por conocer de la inocencia que portan los seres acostumbrados a la vida social del pensamiento libre, que han sido formados en ambientes griegos donde se fomenta la responsabilidad y la confianza en el prójimo, generando una gran dinámica en la creatividad y una mejora en la calidad de vida, sustentados en una plataforma eficiente de justicia y educación. Mientras, en la gran mayoría de las naciones esa plataforma es la fotocopia de lo que vive Venezuela, una quimera de vivos sin formación ni vocación para sus responsabilidades – No requiere mayor explicación. Están claros los dos puntos de referencia, y la inmensa distancia que separa a estos dos modelos de sociedad. Son opuestos y cada uno moviéndose en sentido contrario. En uno, abastece al ciudadano en todos los planos de vida, en el otro lo desabastece.
Hoy los Franceses, la Comunidad Europea, y el mundo aumentan su dosis de sensibilidad ante el terrorismo. Otros países irán despertando su grado de atención hacia los objetivos de estos fundamentalistas. Pero hoy ya no importa el origen del mensaje, lo que está emergiendo mundialmente, es que el nuevo mundo de la libertad será reformateado alrededor del mensaje, claro y conciso, de Mr. Bush. Se construyen nuevas reglas de juego. La nueva forma de libertad será el vivir en espacios donde solamente seres de libre pensamiento convivan, y sus ambientes contendrán nuevas dimensiones donde NO podrá surgir un acto de terrorismo.
El mal generado por la intención de imponer un solo pensamiento en el prójimo ó sociedad será separado del bien. No habrá posibilidad para que un inepto, un resentido, ó un ignorante piense en imponer a otros una amenaza de muerte como lo hizo el difunto, quien pagó su propia apuesta, por obediencia a Cuba: «Patria, Socialismo, ó Muerte». Para poder lograr una Sociedad-Libre-de-Terrorismo, el precio es perder la libertad de la convivencia con la mente fundamentalista. Aunque es claro que ésta pérdida, de manera abierta y definida en la ley, sucederá varios años después que ya la hemos perdido, de manera clandestina y violenta, al aparecer el terrorismo en nuestras sociedades.
Es una especie de ola que aún se propaga desde la Torre de Babel debido al lenguaje de la mente. La tolerancia ante el fundamentalismo ha sido el gran error de la humanidad en el aspecto de vida en sociedad. El nivel cultural nos confunde, nos tiende la trampa del respeto. El respeto al pensamiento libre debe ser protegido, si y solo si, el ente extranjero se integra a la cultura de la nación. Su contexto como país. Un fundamentalista se siente con derecho a quebrar este último respeto, y así atacar a los individuos con diferencia de ideas. El fundamentalismo asesina a unos periodistas por su sátira, sin respetar el contexto de la cultura y vida de la República Francesa, completamente ajena a todo fundamentalismo.
Un gran paso para lograr una Sociedad-Libre-de-Terrorismo es el paso tecnológico. Por ejemplo, la creación de ambientes inteligentes ubicuos en cada calle, pared, espacio existente, aprobados políticamente por la constitución mundial. No es una pregunta para sociólogos su aceptación, es solamente para padres de familias. Ambientes de humo blanco para la salud del hombre libre y de la naturaleza. La neurociencia está dando su paso científico, que será un inmenso aporte cuando pueda descifrar el cuadro neuronal que identifique la mente extremista del terror. Discriminará fácilmente las estructuras neuronales de la mente de un escritor de novelas de terrorismo, así como de la mente de un terrorista, para evitar la presencia del último.
El terrorismo es una formación, por lo que se podrá igualmente de-formar científicamente a través de la psiquiatría y otros campos que la acompañarán. La tecnología trata en su camino avanzar hacia la polarización neuronal que logre recolocar memorias moleculares de manera instantánea para permitir a seres que padecen dolor, depresión, adicciones, y otras enfermedades, como la mente dogmatizada del terror, vivir en salud, y en ese mundo nuevo, según las nuevas reglas de la libertad mundial.
EEUU ha retocado el lema de Francia, y «La France» no lo ha gritado desde La Bastilla. Esta vez ha sido desde «La Place de la République»: “Liberté, Egalité, Fraternité, et Libre Pensée”.
@gerardpaezm