Un triunfo trabajado, sacrificado y significativo fue el resultado que obtuvo Venezuela este martes a Paraguay en el estadio Defensores de El Chaco de Asunción, por la última fecha de las Eliminatorias Mundialistas para Rusia 2018.
El primer tiempo el careo para Venezuela fue complicado. Paraguay, con posibilidades matemáticas de acceder al Mundial de Rusia 2018, salió con todo en su casa. Los centros llovían de derecha a izquierda y de izquierda a derecha.
La circulación fluida del balón era nula. Parecía que la apuesta de Venezuela era mantener la línea defensiva lo más ordenada posible y aprovechar cualquier descuido del rival para contragolpear con balones largos.
La primera ocasión de gol para la Vinotinto llegó a los 20 minutos por medio de un cabezazo de Salomón Rondón a las manos de Anthony Silva, tras un cobro de falta de Tomás Rincón.
Había cierta lentitud y fricción. El combinado guaraní respondió con un derechazo desde fuera del área. Dos minutos después, el esférico rebotó en el área chica de Wuilker Fariñez y por fortuna no pasó la línea del arco.
Paraguay tenía contra las cuerdas a una Venezuela sin ideas. El trabajo de la zaga conformada por Wilker Ángel y Jhon Chancellor en el fondo fue vital para que el marcador permaneciera intacto.
Segundo tiempo movido
El comienzo de la segunda mitad fue muy parecido al de la primera: Paraguay tomó la iniciativa, en búsqueda de mojar las redes, mientras que la Vinotinto aguantaba el asedio.
Ante la falta de juego fluido, Rafael Dudamel no se quedó de brazos cruzados y le dio ingreso a Yerson Soteldo por Sergio Córdova. Previamente, Paraguay hizo dos variantes.
Jhon Murillo estuvo cerca de inaugurar la pizarra, pero Anthony Silva repelió el zapatazo con una soberbia volada. Había espacios para hacer daño. En un mano a mano, Silva volvió a frustrar el grito de gol de Murilllo.
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