El Rector de la Universidad de Los Andes (ULA) el doctor Mario Bonucci Rossini a través de un mensaje le deseó a toda la comunidad ulandina una feliz navidad y que en medio de tantas dificultades que viven las universidades autónomas se debe continuar construyendo país.
A continuación el mensaje navideño:
En Navidad aprovechamos la llegada del niño Dios para formular los mejores deseos. Es también momento de reflexión sobre lo ocurrido en el año que termina.
La Universidad de los Andes ha transitado momentos difíciles, desde invasiones a nuestros predios hasta el casi total desvalijamiento de algunas áreas e institutos. Una novedad para la institución: el concepto de presupuesto desaparece para dar paso a una estructura pagadora de salarios, y además han surgido movimientos que nos hacen presumir que quieren pagar los sueldos de manera centralizada. La autonomía ha desaparecido virtualmente por las últimas decisiones judiciales. Pero lo más doloroso ha sido la deserción. Miles de estudiantes han abandonado nuestra casa de estudios por no tener posibilidades para mantenerse en nuestras sedes. También se han ido profesores, empleados y obreros calificados. Pero, otros nos hemos quedado, otros hemos resistido a pesar que también desapareció el concepto de salario. Y es quizás el mayor problema que enfrentamos durante este año. La mayoría de nuestros trabajadores no tienen ni para pagar el transporte público que los lleve a su sitio de trabajo. Andamos más preocupados en sobrevivir que en cualquier otra cosa. Hasta nos alegramos cuando conseguimos una caja de alimentos, un bono, un pernil, un juguete, olvidando que un sueldo justo es lo que nos a va a permitir comprar lo que necesitamos y no depender de dádivas. Por ello, y no me cansaré de decirlo, nuestra amada Universidad no es una opción laboral, sino una opción moral. Gracias a todos los que nos quedamos en ella hemos mantenido un espacio en el que el debate, el disenso y el consenso es lo normal. Lo anormal es el silencio.
Y en medio de una situación tan difícil debemos seguir apelando a ese noble sentimiento de solidaridad para con todos nosotros, para con la Universidad y para con el país. Y que seamos nosotros los constructores de nuestra paz y nuestro progreso.
Feliz Navidad. Que la solidaridad y la unidad siga prevaleciendo en nuestros corazones, por encima de cualquier otro sentimiento.
Mario Bonucci Rossini Rector de la ULA
