A media semana: La fase final de este régimen está en pleno desarrollo

Por: Alex Vallenilla…
 
De continuar la tendencia actual, en materia política y económica, en unos seis meses el pueblo de Venezuela estará hundido en la peor tragedia jamás vivida. Empezando porque para entonces ya no existirá sistema de transporte público funcionando, por lo menos el de busetas particulares y los pocos del Estado, estarán abarrotados, imposibles de usar y destruyéndose también.
 
En materia de inflación y de sueldos, la situación será sencillamente insostenible, al punto de que en unos seis meses, con cálculos, el venezolano podría estar ganando apenas 2 dólares al mes.
 
Desde ya se ha entrado en la fase final del derrumbe que se viene experimentando desde hace cuatro años. Se trata del fin de este régimen, que ha costado mucho, que ha resistido a los embates de la lucha de los ciudadanos, de los partidos políticos y ahora de la comunidad internacional, que si bien es por sus intereses, está montada en que Venezuela no caiga en una situación fatal y arrastre al resto de la región al desastre, al que pretenden los rusos llevar a todo el continente, con la finalidad de generar más desestabilización a Estados Unidos en su patio trasero.
 
Un país sin gasolina suficiente, sin transporte público, sin comida, sin servicios de salud, con hiperinflación y con sus funcionarios públicos imposibilitados de siquiera lograr acuerdos financieros con el resto del mundo, además de las sanciones que les imposibilita reestructurar la deuda externa, rumbo al default en el año próximo, sólo podrá contar con que la hambruna produzca una mortandad y que los venezolanos dejen de luchar, para sostenerse precariamente un año más en el poder.
 
El régimen ha echado mano a cuanto ha podido para sostenerse, desde la violación sistemática de los Derechos Humanos, el peor robo del planeta a recursos públicos en un país jamás conocido, con un monto de al menos 350 mil millones de dólares, que da cuenta el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, lo que le ha valido ahora tener que atrincherarse en las instancias del Poder Ejecutivo del país, para evitar ser capturados. Un régimen que ha dejado de gobernar y que sólo le preocupa evitar caerse o pierden, tienen ya muy poca capacidad de maniobra, están encerrados en su propio juego y se vuelve a prever situaciones caóticas fuera de control, producto de la extrema crisis que atraviesa todo el país. 
 
Ha sido un tránsito largo. La caída de Nicolás Maduro se ha previsto una y varias ocasiones, puesto que fundamentos ha habido y hay aun para así señalarlo, sin embargo el juego de poderes externos del que todos los venezolanos son víctimas, ha permitido, que junto a los intereses de las compañías petroleras, Nicolás sea llevado al extremo para que termine negociando y entregando los términos que finalmente, rusos, europeos y gringos alcancen en poco tiempo en materia de reparto de las riquezas del país, para proceder a dar “libertad” a Venezuela.
 
@alexvallenilla