Impotencia y dolor es lo que expresan pacientes venezolanos al recorrer innumerables farmacias en busca de un medicamento y solo tener que escuchar decir «no hay».
Gracias a esta circunstancia, y con la penosa necesidad, muchas personas han tenido que trasladarse al exterior para poder realizarse sus tratamientos.
Tal es el caso de los fármacos prenatales como el «Calcibon Natal», el mismo cuenta con una mínima existencia en los inventarios de las farmacias venezolanas, pero en territorio colombiano es conseguido a un costo de $28.000, expresados en moneda colombiana, el equivalente a unos 18 mil bolivares. Lo peor del caso es que, al leer su origen de fabricación dice: Elaborado en Venezuela.
Venezolanos indignados se siguen preguntando ¿cómo es que se juega con la salud y la necesidad de los pacientes? y ¿qué hacen las autoridades para revertir la situación?, se siguen llevando los pocos medicamentos que se están fabricando en el país y nadie hace nada, sin importar las vidas que día a día se siguen perdiendo.NA
