Cientos de merideños denuncian la falta y los altos precios de gas doméstico en la entidad, pagan entre 5 mil y 100 mil bolívares por las bombonas pequeñas y medianas, y una grande de 42 Kg puede estar en el orden de los 400 mil Bs, además de esperar varios meses para obtener este derivado del petróleo.
Las empresas encargadas de la distribución pasan cada mes y medio o hasta tres meses por las comunidades, vendiendo uno o, para los más afortunados; dos cilindros por persona, argumentando que esta regularización es “para que alcance para todos”, actividad apoyada por los “líderes” del consejo comunal.
Por esta razón, los ciudadanos pasan períodos largos esperando que le vendan un cilindro, sea del pequeño, mediano o grande; que según el peso varía su tiempo de uso, y si se cocina con “cautela” puede llegar a durar entre dos, cuatro, y seis semanas respectivamente.
Por otro lado, muchos de los ciudadanos tienen que ir hasta las sedes de las empresas distribuidoras, a llevar sus cilindros vacíos, esperar unos cuantos días, que se pueden convertir en semanas; para poder comprar la bombona. Si no es el caso, algunas personas han tenido que llevarlas hasta las plantas de llenado de la entidad andina para poder comprar “de una vez”.
Las mafias del bachaqueo son quienes dominan el mercado, terceros buscan las bombonas y en algunos casos hasta las hurtan. Actividad que se ha reportado en diferentes comunidades del Estado, en donde trabajadores de las empresas se llevan las mismas y no las regresan. Es el caso de los vecinos del barrio Pueblo Nuevo de la ciudad de Mérida, que tienen semanas esperando que se les devuelvan.
Es de resaltar que ante la difícil situación los merideños se han visto en la obligación de tener que cocinar a leña o en cocinas eléctricas por semanas. Por: Valeria Castro, practicante Unica. Foto referencial.
