Merideños marcharon y entregaron documento al MP exigiendo la liberación de Carlos “Pancho” Ramírez

Una marcha convocada por la Mesa de la Unidad Democrática que partió desde la plaza de Milla hasta la sede de la Fiscalía del Ministerio Público de la ciudad de Mérida donde se hizo entrega de un documento en respaldo al dirigente estudiantil de la Universidad de Los Andes Carlos “Pancho” Ramírez, convocatoria que contó con la participación de la dirigencia estudiantil de la ULA, representantes de partidos políticos y de la sociedad civil.

José Carrero, dirigente estudiantil del movimiento Imagen Universitaria 20 de la ULA manifestó que se encuentran en pie de lucha con la colectividad merideña, para exigirle al gobierno regional y Nacional que su líder y dirigente estudiantil sea liberado, reiterando el llama

do a sumarse a la lucha de calle como protesta por la grave crisis política, social y económica que atraviesa el país.

Insistió Carrero que “estamos marchando por la libertad de Carlos “Pancho” Ramírez quien fue detenido injustamente”, por ello debemos salir a protestar por nuestros familiares que mueren diariamente por la falta de medicinas, salgamos a protestar por los escases de alimentos que tiene al pueblo pasando hambre, y por la ineficiencia de este Gobierno que lo único que ha generado es pobreza en Venezuela”

En este mismo sentido, Carlos Ramos precandidato a la gobernación del estado Mérida, expresó su descontento ante los graves atropellos que han venido padeciendo quienes salen a la calle a ejercer su derecho constitucional a la protesta pacífica, asegurando que la represión es una táctica del Gobierno pues a su juicio “tiene miedo”.

Agregó Ramos “En este momento nosotros nos debatimos entre el miedo que tiene Nicolás Maduro y la fuerza y voluntad de los que queremos libertad, que queremos un cambio”

De la misma manera, afirmo que estos jóvenes estudiantes detenidos en las pasadas jornadas de protestas pacíficas son el futuro del país, exigiendo la liberación inmediata de los mismos.

La fuerte presencia de efectivos de la Policía de Mérida y de la Guardia Nacional Bolivariana apostados en puntos estratégicos de la ciudad para intentar intimidar a los marchistas.