Por: Angélica Villamizar…
Según la Encovi, la pobreza en Venezuela se ubica en un 94,2%, los salarios son de miseria, por lo menos los del sector público, que tratan de ser paleados con la entrega de “Bonos” por parte del Ejecutivo Nacional y que no llegan a 4 dólares, cuando la canasta básica alimentaria está en 300 dólares aproximadamente según el Cendas.
Los venezolanos estamos sobreviviendo a una terrible crisis humanitaria compleja que sufre el país, realizando otras actividades que generen ingresos extras para poder cubrir el mínimo de las necesidades básicas, hay quienes lo hacen por medio de las remesas que reciben de sus familiares en el extranjero, aunque la pandemia por el Covid-19 ha hecho que estos ingresos mermen considerablemente. Solo para alimentarse alcanzan estos ingresos, las familias promedio se olvidaron de tener ropa nueva y recreación ni se diga.
Obtener una vivienda propia en el país se convirtió en un sueño imposible de cumplir para la mayoría de los venezolanos, enfermarse es un lujo, todos los días vemos a través de las redes sociales solicitudes de ayuda para poder cumplir con tratamientos médicos.
Todos los servicios públicos están en muy malas condiciones, algunos están aumentando en su cobro mensual, pero no en mejoramiento.
Otras de las maneras que se están empleando para obtener más ingresos es la venta de gasolina por quienes pasan muchas horas en las colas de las estaciones de servicio para surtir su vehículo y revenderla, por lo que la venta de combustible ha proliferado nuevamente, no está bien hacerlo, pero no hay muchas opciones para el que compra ni para el que lo vende. Todo es consecuencia para poder sobrellevar la crisis y no morir en el intento.
Hay menos población, aún siguen personas huyendo del país en búsqueda de la calidad de vida, mucha fuga de talento humano que necesita el país para salir adelante.
La deserción escolar es otro factor que sigue aumentando la pobreza en el país, los niños y jóvenes no están estudiando por los bajos ingresos familiares, por lo que han tenido que trabajar desde muy temprana edad para ayudar a su familia.
El Estado venezolano ha sido incapaz de cubrir las necesidades de su población y darle mejor calidad de vida, no hay condiciones de superación porque no se cuenta con un empleo que dignifique, no hay educación de calidad, y los demás sectores, como vivienda, salud, y transporte tampoco están garantizados.
Ante estas condiciones aumenta la brecha de la desigualdad, hay muchas caras tristes por las calles, un panorama aterrador que hace que esté más lejos de tener un país próspero; pero aquí seguimos muchos con la esperanza de conseguir lo que tanto anhelamos, trabajando duro todos los días para poder salir adelante.
Correo: amvs286@gmail.com
30-09-2021 (62)