Recrudecen las fallas del servicio de agua en la ciudad de Mérida

La estatal hidrológica Aguas de Mérida C. A. (Aguamerca) viene siendo objeto de críticas desde diversos sectores del quehacer merideño dado que en los últimos meses el servicio de agua potable a desmejorado a niveles alarmantes. Como es de recordar, el 30 de abril pasado la empresa de aguas fue intervenida por orden del presidente de la República, Nicolás Maduro, orden que emanó durante un acto proselitista en la ciudad de El Vigía y que ejecutó el entonces vicepresidente de la República, Tareck El Aissami, quienes respondieron a una denuncia del alcalde del municipio Alberto Adriani, Mezin Abou Assi. El argumento esgrimido era el alza desproporcionada de las tarifas y las fallas constantes en el suministro de agua, que adujeron eran producto de la “incapacidad” del actual gobernador de la entidad, Ramón Guevara, y de los responsables de la hidrológica, encabezados por Henry Dávila.

Tanto el Gobierno regional como las autoridades salientes de Aguas de Mérida argumentaron haber recibido “una empresa en ruinas, con más de 18 años sin mantenimiento sostenido ni inversión en infraestructura”, y que, además, ya lo habían comunicado con varios proyectos al Ministerio de Ecosocialismo y Aguas, a cargo de Ramón Velásquez en su momento.

Precario servicio de agua

Sin embargo, a cinco meses de la intervención, los problemas con el suministro de agua han recrudecido, sectores como Los Curos y La Hechicera son los que más han sentido las fallas, pues —dicen— desde la gestión de Alexis Ramírez ya venían sufriendo la falta de agua, hasta tres y cuatro días sin suministro, lo que incluso provocó protestas en la parte norte de la ciudad.  En cuanto al casco central de la ciudad de Mérida, la situación no es muy diferente, en las últimas semanas la suspensión del servicio se extiende hasta por 24 horas, una o dos veces a la semana. Lo mismo ocurre en las parroquias Antonio Spinetti Dini y Mariano Picón Salas, sobre todo, la Av. Los Próceres, y todos los sectores adyacentes al centro de la ciudad.

La respuesta de Aguamerca

En las redes sociales de la hidrológica, @aguamerca, puede leerse con frecuencia que las constantes interrupciones se deben a factores climáticos: la crecida del río Mucujún por causas de las torrenciales lluvias. También más recientemente se ha argumentado la sustitución del embobinado del hidroneumático y mantenimiento preventivo. No obstante, no hay información acerca de cuál es la condición de la infraestructura del principal acueducto de la entidad ni qué ha pasado con los proyectos introducidos por el actual Ejecutivo regional.

Qué dice la gente

En medio de esta diatriba los más afectados son los habitantes del municipio, Carolina Estrada, quien reside en La Hechicera, denunció que desde hace meses el servicio de agua es inexistente y que ha visto cómo muchos de los vecinos de la zona están mudándose porque ya no aguantan. De igual modo, Ricardo Rivas, estudiante de Economía, declaró que “asistir a clases es un viacrucis. No solo tengo que ir a pie hasta la facultad exponiéndome a los malandros que tienen azotado La Liria porque no hay buses, sino que además voy hasta sin bañarme ni comer porque nunca hay agua en la residencia, así quien va a estudiar, por eso nos estamos yendo”. La crisis de agua en Mérida viene a sumarse a la crisis eléctrica, de salud, de internet, de basura y de gas, servicios públicos básicos que han devuelto a la colectividad a la Edad de Piedra. /Reporteros Comunitarios /YV