Reescribamos el Manual de Carreño e incorporémoslo a nuestra cotidianidad

Entre todos los males que aquejan los venezolanos, hay uno que nos preocupa especialmente porque es inherente a la conducta cívica y moral de los ciudadanos. Un fenómeno de “mala educación y pésimo comportamiento” se está propagando con inusitada virulencia y hace que cada día más, los ciudadanos de cualquier edad, sexo, condición social o ideología, exhiban actitudes inapropiadas y en ocasiones hirientes y humillantes en contra los demás. Basta salir a la calle y observar cómo esa “calaña” de  gente atropella, insulta, se colea, no pide permiso, no saluda ni da las gracias, abusa, engaña, no cede el paso, grita, y le importa un comino el bienestar del otro ser que convive con ella. A este grupo pertenecen los infractores de la coexistencia pacífica: el que anda en su carro, con música a todo lo que dan sus potentes equipos y a quien no le interesa cuánto mortifique su bullicio, pareciera que a este tipo de individuoslos llenara de satisfacción sádica perjudicar al niño, al anciano, a la familia, a la ciudadanía en general. Igualmente el que no respeta los espacios públicos, el que se estaciona en cualquier lugar aun cuando esté prohibido, el que es incapaz de ceder el paso a un peatón. ¿Será que a los sujetos que conforman este patrón de mal educados, nadie les enseñó?¿ o es que en el camino de la vida, y por seguir malos ejemplos provenientes de algunos medios de comunicación, o de algún personaje de la política,  olvidaron lo que sus padres, maestros o representantes  trataron de inculcarle?

El Manual de Carreño

El Manual de Urbanidad y Buenas Maneras, fue escrito por Manuel Antonio Carreño en España, en 1853. Carreño Muñoz (Caracas, 17 de junio de 1812 – París, 4 de septiembre de 1874) fue un músico, pedagogo y diplomático venezolano. También fue el padre de Teresa Carreño, aclamada pianista y compositora, de grata recordación y admiración por su sensibilidad artística.

El libro de Carreño comienza con los capítulos de “Deberes morales del hombre”, “Deberes para con la sociedad”, “Deberes para con nuestros padres”, “Deberes para con la Patria”, “Deberes para con nuestros semejantes” y “Deberes para con nosotros mismos”, entre otros aspectos de interés.

Es totalmente cierto que el Manual de Carreño, necesita de una adecuación al siglo que vivimos, porque algunos de sus criterios pueden parecernos totalmente extemporáneos, inaplicables, y hasta ridículos  por ejemplo: «La costumbre de andar por la calle con un perro es enteramente impropia de personas bien educadas», actualmente sería: “cuando saque a pasear a su perro a la calle, no olvide llevar los implementos necesarios para limpiar lo que su animalito ensucie”. En este orden de ideas, debemos comprender que cuando se escribió este libro, eran otros tiempos, y, sin embargo,  muchos de sus exhortaciones están, hoy en día,  más que vigentes:»Jamás empleemos los dedos para limpiarnos los ojos, los oídos, los dientes, ni mucho menos las narices. La persona que lo hace excita un asco invencible en los demás».

Y es que, “aunque el mundo haya cambiado, el principio básico del Manual de Carreño sigue siendo el mismo: ninguna comunidad funciona si no hay entre sus miembros,reglas de consideración y respeto”

Si queremos configurar una sociedad diferente debemos inculcar buenos modales a nuestros hijos, ellos conforman las generaciones de relevo y los necesitamos convertidos en hombres y mujeres de bien, y eso, solamente se logra aplicando normas estrictas y dando el ejemplo.

Se nos ocurre una idea ¿qué tal si nuestros lectores  nos envían una reflexión, consejo o pauta de conducta, adaptándola al entorno y a la épocaen la cual vivimos y juntos, la redacción de Comunicación Continua y ustedes reescribimos un manual que funcione, que se dé a conocer y se aplique? Tal vez suene a un plan muy ambicioso, pero si el profesor Carreño lo logró, él solito ¿qué nos impide hacerlo a nosotros? ¡Anímense!

Venezuela necesita resurgir en muchos y variados aspectos, donde los valores morales y el comportamiento responsable, harán la diferencia y marcarán el punto de honor de nuestra idiosincrasia. Estamos a tiempo,! Hagámoslo!

A.E. L.L

#1-(13-08-2019)