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viernes, diciembre 13, 2024

Un funcionario ético para un mejor país

Un funcionario es quien desempeña profesionalmente un cargo público, es decir, quien se desarrolla profesionalmente en la administración pública. Hoy día, el sector público emplea actualmente a más del 25 % de la fuerza laboral en muchos países.

El servidor público debe actuar de acuerdo a los principios de respeto, probidad, eficiencia, idoneidad, veracidad, justicia y equidad, entre otros.

De igual manera, debe predominar en su actividad profesional el valor de la ética, esto permite a los funcionarios actuar inteligente y libremente buscando la verdad y el bien de la población, teniendo siempre presente las consecuencias de sus actos.

En Venezuela existe un Código de Ética para el Funcionario que está publicado en Gaceta Oficial Nº 36.268 de fecha de 13 de agosto de 1997, el cual establece en primer término, que los servidores públicos deben velar por la correcta administración del patrimonio público y luchar contra la corrupción y por la eficiencia en la función pública.

En este código está contemplada la conducta que deben tener los funcionarios en el ejercicio de las funciones que desempeñen a cualquier nivel, permanentes o transitorias, remuneradas o gratuitas, originadas por elección, por nombramiento, designación o contrato, otorgado por la autoridad competente, tienen el compromiso moral de actuar en el marco de ese código.

También establece que los funcionarios están al servicio de las personas, y en su actuación darán preferencia a los requerimientos de la población y a la satisfacción de sus necesidades, con exclusión de conductas, motivaciones e intereses distintos de los del ente u organismo para el cual presta sus servicios.

De igual modo, hace énfasis en la transparencia, que exige el respeto del derecho de toda persona a conocer la verdad. Un funcionario transparente, es aquel que mantiene informada a la ciudadanía de toda la actividad que ejecuta dentro de la administración pública.

Por tanto, el deber más importante que tiene un funcionario es el de actuar con estricto apego a lo previsto en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, las leyes y a todas las demás normas.

Un funcionario honesto no obtiene beneficios particulares a través de las tareas que le han sido encomendadas, y en ningún momento y bajo ninguna circunstancia debe abusar de la autoridad y atribuciones que le sean conferidas con ocasión del cargo que desempeñe.

En estos momentos donde se avecinan procesos eleccionarios es muy prudente recordar que los funcionarios no deben utilizar el patrimonio público para financiar actividades destinadas a favorecer o perjudicar los intereses particulares de organizaciones con fines políticos, grupos de electores o candidatura a cargos de representación popular; o hacer uso del cargo o función desempeñada para tales fines.

Tampoco utilizar recursos del órgano o ente donde presta sus servicios, para identificar bienes, obras o vestimenta de servidoras o servidores públicos, con su nombre, imagen, símbolos, seudónimo o eslogan con el fin de promocionar su gestión.

Estas y otras normas morales están establecidas en el Código de Ética del funcionario, por tanto, todo quien ejerce un cargo público debe conocerlo y ponerlo en práctica; pero también los ciudadanos deben formarse en todo lo que concierne en los asuntos públicos, para velar por su buen funcionamiento, por el bien de todos.

Redacción C.C.

21-09-2023

 

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