En palabras del Edil Gerardo Molina, Universidades son las formadoras del futuro del país y por ello deben recibir un presupuesto justo, pero el régimen, lejos de atacar a quienes reclaman con justicia una mejor educación superior, debiese crear mesas plurales de búsqueda de alternativas para optimizar los servicios educativos, asignar recursos apropiados a la investigación y extensión, así como impulsar el desarrollo de la infraestructura y mejorar las remuneraciones de profesores, empleados y obreros.
En el caso de Mérida, defendemos con orgullo nuestra bicentenaria universidad, además defendemos un centro de estudios reconocido como de primera categoría a nivel internacional, pero sino hay un reforzamiento a las condiciones educativas, corremos el riesgo de bajar el nivel educativo y las potencialidades de generar desarrollo científico y tecnológico.
Agrega al cierre Molina que la ciudadanía respalda las actividades lícitas que en pro de la defensa universitaria se han dado, incluso la huelga de hambre, pues representa un sacrificio heroico emprendido por empleados, estudiantes y profesores, que debiese ser escuchado por quienes ostentan el poder para regalar plata, pues por ejemplo en lugar de generar empleo a venezolanos, salen a pasear y a regalar a los foráneos el dinero y el trabajo que bien puede hacer un nacional, por eso la lucha seguirá en defensa de la universidad y Venezuela.
Prensa GM