“Desde el miércoles he estado acompañando al Nuncio Aldo Giordano en los actos que ha venido a cumplir en Mérida. Como por ejemplo, el realizado con motivo de los 30 años de la visita del Papa Juan Pablo II. Este es un nuncio que le molesta al régimen, porque es sencillo y va a donde está la gente humilde. Es primera vez que una autoridad de la Iglesia de esta categoría visita la Parroquia Jají del Municipio Campo Elias y Las Cruces. Allí estuvo con comunidades agrícolas, compartió con la gente de una zona productora de hortalizas y leche”, precisó Dávila.
El Parlamentario expresó que, por encima de cualquier cosa, El Nuncio promueve la paz y el diálogo y eso le molesta a Maduro, “quien hace todo lo contrario”.
“Yo le exijo al Gobernador una investigación y que además las autoridades correspondientes apliquen la Ley a los que lanzaron molotovs y pintaron iglesias como la del Llano, Milla y La Parroquia, que amanecieron en la mañana de hoy rayadas y con vestigios de artefactos explosivos que les lanzaron. El propio Gobernador Ramírez recibió a Aldo Giordano, por ello es inconcebible que deje pasar esta situación sin fijar posición. No podemos permitir la intolerancia religiosa y el irrespeto a la fe de la mayoría de los merideños, que es católica”
El dirigente opositor aseveró que defiende a la Iglesia y a sus autoridades porque ésta ha sido factor coadyuvante en el progreso en todos los aspectos de la vida merideña. “Sólo un régimen que profesa el odio, la intolerancia y la violencia puede amparar estas agresiones que deben rechazadas por todos, aún más cuando hace poco sucedió un acto terrorista como el practicado contra el semanario Charlie Hebdo en París y cuando se están cumpliendo 70 años del Holocausto, lo cual nos recuerda que el fundamentalismo deriva en persecución racial y religiosa”.
El Diputado finalizó afirmando que esto que sucedió en la entidad andina es muy grave y demuestra que en Venezuela “estamos sobre un barril de pólvora, pues no hay un deseo de paz, reconciliación y diálogo por parte del régimen”. “Todos los merideños nos unimos en oración para condenar este acto fascista que evidencia que estamos en manos de fundamentalistas que, por acción u omisión, amparan este tipo de agresiones.”