251 neonatos han muerto en el Iahula en lo que va de año 2018

Las retaliaciones políticas contra el Iahula no afectan la directiva del hospital, sino que están “asfixiando al pueblo de Mérida” en general, aseveró la Doctora Marlene Salcedo, Jefe de Atención Médica del centro de salud.

De enero a agosto de 2018, 251 menores de un año perdieron la vida, 83 de ellos por septicemia adquirida dentro del hospital, según puntualizó Marlene Salcedo, Jefe de Atención Médica del Iahula. Lo que representa un aumento de 55,77% con respecto a la misma fecha del año pasado, con dichas cifras el Instituto Autónomo Hospital Universitario de los Andes refleja su más elevada tasa de mortalidad neonatal de los últimos tiempos.

Así mimo, Akbad Fuenmayor, Jefe de Pediatría, indicó que han tenido que paralizar actividades en 14 áreas de servicio que son fundamentales porque están dirigidas a atender a las principales causas de muerte de la población, en este sentido, se refirió a la atención de pacientes cardíacos y reveló que cerca de 30 personas han muerto a la espera de un marcapaso y que la lista de pacientes actual que están en riesgo por la no colocación de este dispositivo es de 103. “una de las principales causas de muerte son las enfermedades cardiovasculares, y tenemos un servicio de cardiología cerrado, no se puede hacer ningún tipo de estudio que implique hemodinamia, lo cual significa la muerte para quien sufra un infarto”.

Recalcó que la salud pública se ha privatizado de forma tácita, ya que dado el desabastecimiento de insumos médicos y equipamiento adecuado para el funcionamiento óptimo de todas sus áreas de servicio, el nosocomio más importante de la región se ha visto obligado a pedir a los recluidos y sus familiares los implementos necesarios para brindarles asistencia, por ello indicó que en Venezuela las familias gastan en salud, más de lo que perciben monetariamente lo cual denominó “gasto catastrófico”, basándose en postulados económicos y aseguró que la sociedad se encuentra viviendo “un darwinismo social, el que tiene dinero es el que sobrevive el que no fallece”.

Igualmente, se conoció que se han presentado 20 muertes por desnutrición, de los cuales 14 fallecidos eran menores de edad. Sobre las enfermedades ya erradicadas, Salcedo reportó más de 50 casos de paludismo y 8 de sarampión, además alertó de la existencia diagnosticada de gripe AH1N-1, difteria y la rabia humana, esta última podría considerarse la más grave, por lo antigua que es dicha patología y la gran cantidad de años que habían pasado sin que se registrara un caso “jamás lo habíamos visto, sólo en los libros cuando estudiábamos, es una cuestión de preocuparnos”, comentó alarmada la especialista.

«Estamos cansados de ver morir a los pacientes, nuestra salud psicológica ya esta afectándose además del desgaste físico que vivimos por asistir a los enfermos». En declaraciones de la Jefe de Enfermería del hospital universitario la Licenciada Gregoria Vega hizo eco de la crisis humanitaria que vive el centro de salud de carácter público. Las renuncias o abandono también afectan nuestro trabajo ante los miseros sueldos que le pagan al personal altamente formado.

«Somos el cuerpo que atiende las 24 horas a los pacientes, somos un personal calificado que cada día somos menos» expresó que el déficit de enfermeras ha aumentado por la renuncia masiva del gremio a causa de sueldos insostenibles. Gregoria Vega representante del cuerpo profesional más grande del centro de salud insistió que la ola de renuncias va en aumento con 300 enfermeras este año que deciden abandonar sus puestos de trabajo por hallar un sueldo que ayude a sobrevivir.

En concordancia con lo antes expuesto, la jefa de Atención Médica del Iahula, dijo que en dicha entidad hospitalaria “no tenemos como resolver el día a día”, e hizo referencia a que si se presentara un desastre natural que arrojase heridos el Hospital Universitario no tuviese los implementos suficientes para atenderlos.

Lawrence Parra/ Marian Molina