El punto de partida de cualquier planteamiento transformador pasa por incorporar “semillas de cambio” (SER). Imaginen que todas nuestras acciones, interacciones y proyectos tuviesen como base innegociable pasión, honestidad, solidaridad, confianza, responsabilidad, cooperación y respeto, el orden de las cosas sería distinto. Es esa la apuesta de una nueva lógica económica, basada en valores propios de la convivencia humana (las semillas), para que el actuar este dado desde una nueva consciencia individual y colectiva un nuevo HACER.
Por: Eco. Daniel Vásquez
Foto: Daniel Vásquez