El Gobierno de Estados Unidos deportó este jueves 13 a un primer grupo de migrantes venezolanos que ingresó de forma ilegal a través de la frontera sur, solo horas después de haber puesto en marcha un nuevo programa, en conjunto con México, para “abordar la migración irregular más aguda y ayudar a aliviar la presión sobre las ciudades y estados que reciben a estas personas”.
El periodista de Fox News Griff Jenkins aseguró en Twitter que la deportación se hizo bajo el «título 42», una herencia del Gobierno de Donald Trump (2017-2021) considerada como «inhumana» por grupos migratorios, porque permite la expulsión expedita de extranjeros en la frontera argumentando peligro de la covid-19.
El nuevo programa de la administración de Joe Biden para los venezolanos, anunciado el miércoles, busca favorecer durante dos años a unos 24.000 migrantes que entren al país por avión y que tengan familiares con estatus legal migratorio que los patrocinen, pero devuelve de inmediato a los ciudadanos venezolanos que lleguen por la frontera sur.
Estados Unidos también planea ofrecer asistencia de seguridad adicional para «ayudar a los socios regionales a abordar los desafíos migratorios en el Tapón de Darién». Según datos de Migración Panamá, 151.582 migrantes cruzaron la selva del Darién, un paso migratorio entre Colombia y Panamá, en su camino hacia Estados Unidos. Los venezolanos representan el 71% de esa cifra.
Yael Schacher, directora de Refugees International para las Américas y Europa, señaló a EFE en una declaración por escrito que los migrantes más vulnerables quedarán fuera del programa, como aquellos que actualmente están en tránsito en países como Honduras y Guatemala, especialmente si carecen de pasaporte.