Aquí vamos ya, en crisis y pandemia, con el gusanillo decembrino en la humanidad de todos, despertando con suma antelación, dentro de lo que cabe, de cara a lo que serán las festividades navideñas, de fin de año, adecuando ya los oídos para escuchar, la música aguinaldera, que debe compartir espacio con las gaitas, pero que al fin de cuentas, asoman en el ambiente,  lo tradicional costumbrista por la época final del año.     

Con la premisa de mantener la costumbre y tradición, regresan con sobrado ímpetu andino, el conjunto aguinaldero “Los Novatos de Santa Ana”, fundado hace 44 años (1978) por Don Pedro Rivas Quintero “Perucho Briceño”, quien agrupa a los muchachos de la comunidad de Santa Ana, al norte de Mérida, municipio Libertador del Estado Mérida, con la firme objetivo de alegrar fiestas decembrinas en el sector, hacerse sentir en las misas de aguinaldos, pautadas para entonces, a las cinco de la mañana, en la iglesia de La Milagrosa, en la visita a los pesebres caseros y por supuesto, en la inigualables Paraduras del Niño.

Vale destacar que por el año 2018, por iniciativa de los muchachos que iniciaron el conjunto aguinaldero y al celebrarse los 40 años de fundado, deciden animar a todos los antiguos integrantes, realizan un reencuentro de Los Novatos de Santa Ana, iniciativa que tuvo total recepción de aquellos integrantes llevando ésta vez a sus hijos y hasta algunos nietos, logrando renacer al conjunto, volviendo nuevamente en el 2019, con nuevos niños, retornando a sus presentaciones en festivales y estaciones radiales, así como en las tradicionales misas de aguinaldos, pregones y parrandones navideños de distintos sectores y establecimientos comerciales.

 “Aguinaldos vienen, aguinaldos van”, en Mérida, desde ya, vienen de la mano de “Los Novatos de Santa Ana”, cuyos integrantes, niños(as) en edades comprendidas de 6 a 13 años, algunos de ellos, nietos de los fundadores del conjunto aguinaldero, en el que las damitas son las cantantes y los hombrecitos, los ejecutantes del tambor, las maracas, charrasca, furruco, pandereta, cencerro, de tal manera, de afinar las piezas aguinalderas, preparándose desde ya, para las fiestas navideñas y de fin de año, reconociendo con su presencia y actuación, la paciencia y empeño de su fundador, Don “Perucho Briceño”, por mantener y educar a los infantes, en lo que significa, las tradiciones navideñas.

Siempre he recalcado, que por nada ni por nadie, las tradiciones, costumbres, vivencias, que se viven y se comparten entre el colectivo andino merideño venezolano, no deben perderse, por el contrario, lejos de la cruda coyuntura socio económica política del momento y vigencia de una pandemia, hay que mantenerlas, preservarlas, conservarlas y en sus efectos, los niños (as) integrantes del conjunto aguinaldero “Los Novatos de Santa Ana”, dan el ejemplo, así lo piensan y entienden, va por ellos, en el inicio tempranero de Navidad (Giovanni Cegarra, GC. CNP. 2229) – Fotos Pedro Rivas.}

27-11-2022