Con fundamento: Falsa libertad

Con fundamento: Falsa libertad

Por: Bernardo Moncada Cárdenas…

«La democracia entendida como un mercado donde las ideas se exponen e intercambian libremente ha dejado de tener sentido desde que los medios de comunicación se dedican a pervertir la información veraz. […] La coerción y la disuasión continuarán siendo factores decisivos de la guerra en redes sociales…» Nuño Rodríguez, politólogo, en QuixoteGlobe,com

Con la posibilidad de formar grupos compactos de opinión y presión, sin necesidad de los cuerpos intermedios que son los partidos, internet llega a ser instrumento clave de la democracia. Como tal se ha presentado: un sistema de intercomunicación no jerárquica el cual permite difundir mensajes que valoran, promueven y defienden, o descalifican, rechazan, y atacan determinadas posiciones y corrientes de pensamiento.

La rápida masificación de las redes, sin embargo, su expansión a ritmo y escala inusitados, exigiendo creciente y costoso soporte tecnológico, ha motivado su explotación como eficaces y lucrativos vehículos publicitarios y como armas sofisticadas al servicio de proyectos de poder. Imperceptiblemente, internet se ha convertido en «un mero escenario de guerra nuevo donde diferentes poderes pugnan por influir sobre una audiencia incauta que cree estar recibiendo información fidedigna de otros usuarios», como afirma Nuño Rodríguez.

Ante el proceso electoral que se avecina sin pausas, tal capacidad de influir vuelve a utilizarse para coerción y, más que nada, para disuasión. Es claro que al dominante grupo en el poder conviene disuadir la masa de votantes que, rechazando el caos y la precariedad cotidianamente sufridos por causa de sus políticas, podrían desplazarle multitudinariamente con el voto castigo.

Con una astucia que cabe reconocer, y con no poca colaboración del débil liderazgo opositor, una matriz de opinión disuasiva ha prosperado en las redes: no se amenaza al ciudadano con violencias; se manipulan la represión a los políticos y las acciones del ente electoral para hacerle temer la inutilización de su voto. Para ello, las redes sociales, donde muchas veces seguimos o agredimos voces cuyo rostro no estamos seguros de conocer, son el instrumento favorito. Los grupos de opinión que se compactan, dócilmente conducidos por trending topic, etiquetas, algoritmos y bots, creen estar uniéndose libremente, difundiendo libremente su pensamiento, y en lugar de ello están siendo coaccionados al servicio que quienes operan dichos ardides o pagan a quien las puede manejar.

No solamente, entonces, se cae en actitudes que solamente convienen al régimen imperante pensando perjudicar su poder, sino se pierde la propia personalidad mientras se cree estarla fortaleciendo. Con toda razón el Papa, en las Jornadas Mundiales de las Comunicaciones Sociales, ha advertido que las redes pueden aislar y alienar, en lugar de unir y fortalecer la persona: «Además, la identidad en las redes sociales se basa demasiadas veces en la contraposición frente al otro, frente al que no pertenece al grupo: este se define a partir de lo que divide en lugar de lo que une, dejando espacio a la sospecha y a la explosión de todo tipo de prejuicios.» (LIII Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales).

“La verdad os hará libres”, afirmó razonablemente Jesús. Por lo contrario, la falsedad aliena. El estado de incertidumbre y desconfianza voluntariamente promovido en twitter o Facebook, nos transforma sutilmente en instrumentos siervos de quien tiene el poder de persuadirnos a su conveniencia.

Está en nuestras propias manos desarmar ese poder negativo, cambiando nuestra actitud en ese mundo y moldeando lo que Francisco describe como «la red que queremos. Una red hecha no para atrapar, sino para liberar, para custodiar una comunión de personas libres, en la que la unión no se funda sobre los “like” sino sobre la verdad, sobre el “amén” con el que cada uno se adhiere […] acogiendo a los demás», liberándonos de la falsa libertad, decidiendo inteligentemente lo que nos toca hacer frente a las elecciones.

04 agosto 2021 bmcard7@gmail.com