Este lunes, durante el desarrollo del Consejo Universitario, la comisión designada para analizar y presentar criterios sobre la distribución del crédito adicional, el cual llegó recientemente a la Universidad de Los Andes, presentó el informe correspondiente que contiene criterios interesantes que permiten avanzar en una distribución más coherente y sin tanta discrecionalidad, orientada a resolver problemas de financiamiento de las actividades fundamentales de la universidad, como lo son la docencia, la investigación y la extensión.
“De esa manera se sacrifican recursos que pudieran haber ido a algunas dependencias centrales, se toma en cuenta la asignación presupuestaria de algunas dependencias con el objeto de hacer una nueva distribución y permite también iniciar un camino diferente en la asignación de los recursos”, indicó José María Andérez, secretario de la ULA.
Si bien esta distribución de las insuficiencias permite avanzar, es necesario que esta comisión, la cual además fue declarada permanentemente como comisión asesora del CU, estudie las distorsiones que hay en el presupuesto, esto por la manera rápida con la que se tuvo que hacer el equilibrio presupuestario.
“Hay en el presupuesto del año 2015 cosas inexplicables, como que una oficina recién creada tenga más presupuesto que oficinas de vieja data y que además sirven a toda la comunidad universitaria. Se requiere además garantizar un suministro constante de recursos hacia el área de la salud, fundamentalmente hacia el Camiula, para la adquisición de materiales, suministros y equipos. Se ve con claridad que la comunidad universitaria está gastando una cantidad de recursos en estudios necesarios para los diagnósticos y que pudieran -si el equipamiento estuviera en esta dependencia- ser ahorrados por la institución y reinvertidos en la compra de más tecnología, equipamiento y la experticia para manejar estos equipos”, señaló el profesor Andérez.
Cuando se solicita una cantidad de recursos por insuficiencias y se asigna solo un tercio de los mismos, es imposible poder atender a todos por lo que, con seguridad, algunas dependencias han sentido que no se les ha tomado en cuenta suficientemente, sin embargo resaltó el profesor Andérez, que este es el primer paso de un nuevo camino, en el que habrá que hacer los ajustes correspondientes, para que el presupuesto universitario se destine hacia aquellos aspectos que son relevantes y se tomen en cuenta las actuaciones de las oficinas, su personal y su impacto en la asignación del presupuesto del año 2016. “Es importante que en el primer trimestre del año que viene, esta comisión designada por el CU, genere una serie de foros y talleres, para comenzar desde temprano a hacer el ejercicio presupuestario del año 2016”, dijo finalmente el profesor Andérez. Golfredo Lobo / Prensa ULA / CNP 14.293
