Llegó octubre reconvertido

Llegamos, a duras penas, al mes de octubre. Sí, porque los venezolanos vamos viviendo a punto de milagros que aparecen de vez en cuando y que nos permiten ir sorteando la persevera realidad a la que estamos sometidos gracias a los desaciertos tanto del oficialismo como de la llamada oposición, que como diríamos en criollo “no dan pie con bola”. Y las consecuencias las estamos pagando con creces los ciudadanos sometidos a las torturas diarias de: apagones, falta de agua potable, inseguridad desbordada; sin gasolina, gasoil y gas doméstico. Los precios de los productos de la cesta básica inalcanzables porque ya ronda en los 250 dólares, y… ¿quién con un trabajo honesto alcanza esa cifra mensualmente? Y ni qué decir del precio de las medicinas. Se patentiza a diario lo que acaba de señalar la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida en Venezuela (Encovi 2021) de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) cundo reveló que la pobreza en Venezuela se ubicó en 94,5% y la pobreza extrema alcanzó un 76,6%.Somos el país de los zapatos rotos y la ropa remendada. Muchos compatriotas están pasando hambre, pero lo peor, los más indignante, es que otros, un reducido grupo (5%) muestra sus riquezas sin ninguna compasión por los demás. Basta mirar las redes sociales: fiestas faraónicas, comida en abundancia, viajes en jets privados, camionetas último modelo, en fin, el país de jauja, se quedó pequeño en comparación al nuestro.  

Muchas cosas no entendemos de acciones tales como:

-Un llamado a clases presenciales, para este mes de octubre, pero no sabemos si todos los problemas planteados por los docentes, ya están resueltos, especialmente lo que se refiere a la vacunación contra el coronavirus de toda la población escolar, el arreglo de la infraestructura de los planteles: colegios, liceos y universidades, así como también el mejoramiento sustancial y honroso de los sueldos del personal que labora en los centros educativos. La necesaria dotación de útiles escolares para los niños, porque la lista y los uniformes, valen un dineral que las familias, empobrecidas, no tienen.

-Las semanas flexibles de noviembre y diciembre, anunciadas por el presidente Nicolás Maduro para que “la actividad comercial, económica, con bioseguridad y mucha autodisciplina, se desarrolle». Mientras que La Federación Médica Venezolana (FMV) advirtió el viernes 24 de septiembre sobre el peligro de levantar las medidas sanitarias anticovid en Venezuela durante esos meses.

-La vacuna Sputnik V, en su segunda dosis, ¿alcanzará para todos los que se pusieron las primera dosis? Porque las colas son terribles y angustiantes, más porque hay muchas personas de la tercera edad  que la requieren prioritariamente.

-El coronavirus sigue haciendo estragos por doquier y los venezolanos inconscientes y sin sentido común, continúan jugando a la ruleta rusa, al “hacerse los locos” para no acatar las medidas de bioseguridad altamente difundidas.

-Por cierto, ¿Qué ha pasado con el dialogo entre el gobierno y la oposición celebrado en México, que representaba un nuevo intento para tratar de dar solución a la creciente crisis política, económica y social que azota a Venezuela?

Con los pelos de punta.

Los venezolanos amanecemos hoy con los “pelos de punta” Se da inicio  a la reconversión monetaria. Esperamos, que como dice el dicho” a la tercera va la vencida” y todos anhelamos, por el bien del país, que esta vez, la medida, sí funcione por complicada y engorrosa que nos parezca. Lamentablemente, las dos anteriores, la primera, que eliminó tres ceros a la moneda, (2008), y en el en 2018, ya con Nicolás Maduro como presidente se aplicó la segunda reconversión que, inicialmente, iba a eliminar otros tres ceros, pero que finalmente borró cinco. La moneda fue rebautizada como bolívar soberano ¿lo recuerdan? La decisión de esta nueva reconversión que entra hoy en vigencia, nos refiere a que  las dos anteriores no dieron los resultados que estaban previstos. Hemos continuado con una hiperinflación galopante que no da tregua  y que ha hecho que la gente se desespere y busque salir del país a toda costa. Según las últimas cifras unos 6 millones de venezolanos están en otras latitudes… Y la pobreza avanza inexorablemente.

Enfrentemos la incertidumbre.

El Banco Central de Venezuela anunció en agosto la eliminación de seis ceros a la moneda local, que pasará a llamarse ‘bolívar digital’. Hay nueva familia de billetes y monedas, pero a estas alturas solamente la conocemos por foto. Lo de “digital”, asusta un poco porque es bien sabido que en Venezuela las comunicaciones no son óptimas y no todos los venezolanos tienen acceso a tecnología de punta para hacer sus transacciones. El BCV afirma que la transformación de la moneda en su formato digital y su uso a través de los medios electrónicos “facilitará la mayor conexión de la población con el signo monetario, a pesar de los ataques externos y los procesos especulativos inducidos. “Amanecerá y veremos.

Los venezolanos debemos acostumbrarnos a estas nuevas cifras. Para conocer el precio de un producto en bolívares digitales, debe dividir entre 1.000.000, es decir, quitándole seis ceros a la cifra original. Por ejemplo, un paquete de harina de maíz que antes costaba 3.750.000 bolívares soberanos, ahora pasará a valer 3,75 bolívares digitales.

Por el bien del país, los venezolanos apostamos a que esta nueva reconversión de los resultados previsto por el gobierno nacional, pero según los economistas, si no se pone en marcha un programa contra la hiperinflación y se toman medidas concertadas para hacer creer la economía, esta nueva reconversión tiene fecha de caducidad.

Y diríamos en nuestro criollísimo lenguaje “que Dios nos agarre confesados” y nos aliente para no perder la fe en que nuestro querido país, resurgirá de sus cenizas, como el ave fénix.

Redacción. C.C.

01-09-2021