Carlos Ramos (Dip. AN): Es necesario que los merideños participen en la decisión de sus candidatos

El diputado a la Asamblea Nacional (AN) por el estado Mérida, Carlos Ramos, declaró hoy que las elecciones parlamentarias correspondientes al año 2015, “son una oportunidad para la democracia venezolana”, a través de una oposición que en corto plazo debe convertirse en la alternativa democrática para todos los venezolanos.

El legislador merideño afirmó que el gobierno cuenta en la actualidad con el 80 por ciento de rechazo ante las malas políticas incrementadas en los últimos tiempos. “Ese porcentaje se convierte en tierra fértil” para la oposición, sabiendo administrar su participación.

Con firmeza agregó que esa victoria solo será posible si se involucra directamente a los militantes de los diferentes partidos políticos de la oposición, a los independientes, tomando en cuenta también, al alto porcentaje de psuvistas decepcionados y frustrados por las medidas económicas adoptadas por Nicolás Maduro.

“Es necesario que todos participen en la elección de sus candidatos, que voten en primarias para seleccionar a los diputados que sesionarán a partir del 5 de enero de 2016”, y esa unidad necesaria, acotó, se construye a través de unas elecciones primarias con participación, fe, emoción y expectativa de cambio.

Considera Carlos Ramos que debe prevalecer el reconocimiento y respeto entre todos los actores de la alternativa democrática, pues el pueblo no quiere “toderos” o personas que aspiren a todos los cargos que surjan en cada proceso eleccionario, por lo tanto, quien aspire ser diputado no debe presentarse como candidato a la gobernación para el año 2016, haya ganado o perdido en las parlamentarias del 2015.

Subrayó que quien gane debe representar a los merideños durante los 5 años en el cargo para el cual fue electo, y quien pierda en un circuito, no tiene oportunidad en el estado. “Las parlamentarias son una oportunidad excepcional para construir una opción política muy sólida y no deben ser aprovechadas como un trampolín”, concluyó.

Prensa Carlos Ramos