Por la calle real: Estrenando alcalde en tiempos de adviento

Por: Fortunato González Cruz…

Alcides Monsalve es merideño, político y editor del Diario Frontera, del que su padre, Benedicto Monsalve, fue fundador. Con él y con su esposa María Eugenia Cedillo tuve una bonita amistad. Militante de Acción Democrática y por lo tanto es de pensamiento social demócrata. Tiene, en consecuencia, bases más que suficientes para ser un buen Alcalde de Mérida.

El éxito de Alcides Monsalve radica en primer lugar en asumir el gobierno de la ciudad a dedicación exclusiva, puesto que los merideños tenemos derecho y el elegido el deber de desempeñar su cargo. ¿Puede ser un peldaño hacia la gobernación del Estado? Sí, pero a su debido tiempo, cuando haya demostrado su capacidad de gobernante y exige, a mi modesto juicio, al menos una reelección. Los destiempos han sido fatales para algunos de sus antecesores.

El Programa lo determinan las urgencias que vivimos y la ciudad. La emergencia la marca la basura, la limpieza de la ciudad, el transporte público y la seguridad ciudadana. La ciudad le impone metas más ambiciosas. Leer el mensaje de Mérida significa captar la sensualidad femenina y acuática  de una cuidadjoven, alegre y culta. Esta joven luce sucia y desaliñada, descuidada y necesita que la consientan para recuperar su gracia. Ella sigue dando sus diuturnaslecciones culturales, ecológicas, estéticas y éticas y clama porque la autoridad municipal la entienda y la comprenda. La gestión de un Alcalde en Mérida debe tener el sello de las lecciones que les da la ciudad a sus habitantes.

Ejercer el gobierno de Mérida es tarea honrosa y exigente. El emplazamiento entre montañas, valles y ríos le obliga a ocuparse del ambiente natural y urbano. Su historia vinculada indisolublemente a la Mitra Episcopal y a la Universidad le impone al gobierno local una impronta educadora y culta. El golpeado patrimonio urbano le señala mano firme para recuperar la ciudad de la anarquía.

Necesitará recursos y tendrá que buscarlos en primer lugar aquí entre los merideños, en sus contribuyentes, en su economía privada y en sus instituciones. Luego tendrá que acudir a instancias nacionales lo que significa obrar con prudencia y con audacia. La compañía del gobernador Ramón Guevara será clave en estos menesteres. También podrá ir a instancias internacionales con proyectos bien justificados y mejor definidos.

No se puede gobernar con ocurrencias y Mérida está atrasada en la definición de su Plan de Ordenación del Territorio y de su Plan de Desarrollo Urbano Local, que deben privilegiar lo ecológico, el orden urbano, la calidad de los espacios públicos, la movilidad, el cuidado del patrimonio, la calidad de los servicios y la economía local. Los merideños eligieron a Alcides Monsalve para que encarne sus sueños y sus angustias. Dios y la Inmaculada Concepción, patrona de Mérida, lo ilumine y aproveche esta oportunidad que es un gran honor y un exigente compromiso.

Es un mensaje extensivo a quienes recibieron semejante mandato en nuestras ciudades y pueblos de Mérida. FELIZ NAVIDAD